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BALONMANO | MUNDIAL FEMENINO

Sole López: “Antes que a Países Bajos hay que ganar a Argentina”

Las Guerreras se enfrentan a las argentinas, a las que derrotaron en Santander y con trece jugadoras enroladas en equipos españoles.

Sole López, a la conquista de Escandinavia.

Las Guerreras tienen encarrilado el grupo, pero no se admiten confianzas. Por eso, todas repiten que hoy, ganar o ganar a Argentina, a la que ya derrotaron en el TIR de Santander, pero ahora es un partido clave (18:00: Teledeporte) en la ciudad danesa de Fredrikshavn para no perder la ventaja en este Mundial de Dinamarca, Suecia y Noruega. Trece de las jugadoras de las selección de Argentina están enrolados actualmente en equipos españoles.

Sole López (Málaga, 31) entró en la convocatoria de Ambros Martín para el Europeo prácticamente sobre la bocina, y no le ha hecho ascos a la posibilidad que le ha dado el nuevo seleccionador. Es de las jugadoras que estuvo en el Mundial de Japón, el del subcampeonato con la derrota en el último instante ante Países Bajos. Lleva 84 encuentros con las Guerreras, y según dicen, la extremo izquierdo del Ciudad de Málaga es de las que alegran las concentraciones. Frente a Brasil, su último gol resultó decisivo.

-Cuando ya no se contaba con usted para esta cita, resulta que llega para suplir a una lesionada y se ha ganado la confianza del seleccionador.

-La verdad es que estoy en el Europeo de la peor manera que se puede llegar, por la lesión de una compañera.

-Y amiga.

-Pues sí, porque Jennifer Gutiérrez y yo hemos sido compañeras de club de balonmano y hemos jugado también al balonmano playa. Hablamos con frecuencia, y hace menos de diez minutos le estaba preguntando por cómo va su recuperación. Nosotros, los deportistas, estamos obligados a convivir con las lesiones, que te rompan los planes.

-¿Y ya se encuentra totalmente recuperada?

-Ha sido un año complicado, porque tuve que operarme del hombro y estuve cinco meses sin poder jugar; vuelvo, y tras la pretemporada, me rompo un dedo, y otros cinca semanas parada. Ahora estoy bien.

-Se le nota en la selección. Da la sensación de estar fresca como una lechuga.

-Si lo dice por el partido ante Brasil, que jugué el choque completo, pues sí. Tuve mucho trabajo pero me sentí bien, y aporté goles importantes, sobre todo el penúltimo de España, que me encontró muy bien Silvia Arderíus en el extremo, y yo creo que lo tuve tan fácil porque mi marcadora se despistó un poco, y se debió creer que había circulado, que no estaba allí.

-Una hora sin relevo. Muy gráfico.

-Hay tiempo y partidos para todas, porque aquí ganamos en equipo, y se necesita la labor del grupo. Luego, hay momentos en que estás inspirada y te exprimen un poco más.

-Sin despreciar a Argentina y a la República Checa, ¿el objetivo ahora es Países Bajos mirando de reojo los cruces de cuartos?

-Para nada. Vamos día a día y sin saltarnos etapas. El primer rival es Argentina, y no miramos más allá.

-No me diga que cuando toca Países Bajos no siente algo especial.

-Ya nos hemos enfrentado en más ocasiones, y no creo que exista ninguna sensación especial ni contra las jugadoras ni contra el país. Lo que pasó en Tokio son cosas del deporte; y si ocurrió de aquella manera, que perdimos la final, pues es que tenía que suceder. Siempre te queda el regusto de intentar ganarle en la siguiente oportunidad, y sería importante el desquite el domingo.

-Están llegando muchas chicas jóvenes al equipo. ¿Qué les cuenta una veterana?

-Llegan con mucha seriedad y concentradas con el trabajo y aportando mucho a la selección. Preguntan algunas cosas respecto a cómo nos sentíamos o qué hablábamos en el vestuario en algún caso concreto. Nada más.