Ortega necesita ganar por amor propio el Mundialito de Clubes

De martes a domingo se disputa en Dammam (Arabia Saudí) la decimoquinta edición de la Súper Globe, el Mundialito de clubes, que en esta ocasión amplía a doce los equipos que participan: cuatro grupos de tres, y los primeros a la semifinales (sábado), y el domingo final y tercer puesto. En los primeros años (arrancó en 1997) eran cuatro conjuntos representado a los cuatro continentes, y poco a poco se ha ido ampliado el número para ofrecer un torneo con más interés deportivo

España domina esta competición, con el Barça como el equipo con más títulos: cinco en siete presencias, y con Aitor Ariño (cinco) como el que más veces se ha colgado el oro. El primer campeón fue el Cajacantabria de Santander, y el Ciudad Real y el Atlético de Madrid también han inscrito su nombre en el historial de vencedores

Para Carlos Ortega este torneo es una especie de necesidad, sobre todo por amor propio, porque fue la única competición que no ganó en la campaña 2021-22, su debut como entrenador azulgrana: cayó en la final ante el Magdeburg alemán. Sin embargo, para esta oportunidad planteada como revancja la preparación ha sido nula: el equipo ha viajado hoy, y salvo los cuatro internacionales españoles (Gonzalo Pérez, Ariño, Gòmez, y Parera, que jugó con los júniors) que salieron de Barcelona, el resto lo hace de lugares diferentes al tener compromisos con sus selecciones respectivas: Francia, Suecia, Eslovenia, Brasil, Croacia y Dinamarca. Más o menos en el mismo caso está el Kielce polaco, que de 16 jugadores ha tenido trece en diferentes selecciones, con los Dujshebaev, Dani y Álex, y Migallón con España. Sergy Hernández, portero del Benfica, es el séptimo de los Hispanos que estuvo en Jaén que ahora se displaza a Arabia sin entrenarse ni un día con el equipo porugués.

De los doce equipos cuatro están dirigidos por entrenadores españoles: el campeón de la Champions, el Barça, por Carlos Ortega; el subcampeón, el Kielce, por Talant Dujshebaev; el campeón de la Liga Europea, el Benfica, por Chema Rodrìguez; y el campeón de África, el El Ahly, hasta la semana pasada a las órdenes de Dani Gordo y ahora con David Davis (exseleccioandor de Egipto) en el banquillo. Y un quinto, que es portugués pero con residencia oficial en Vigo, Paulo Pereira, al frente del Al-Kuwait.

De esta docena de representantes del balonmano mundial, el Ministros de México, el rival del Barça en el debut de este martes (15:00, Esport3) es el más exótico y debutante por su triunfo en el torneo de América del Norte. Hace su presentación en la alta sociedad con una plantilla local, con un refuerzo brasileño. El otro rival del grupo de los azulgranas es el Esperanza tunecico (jueves), campeón de la competición árabe. El primer clasificado se enfrentará al primer del C, presumiblemente el Kielce, en las semifinales, mientras que para la otra semifinal se perfilan el Magdeburg y el Benfica. De todos, el que tiene una presencia más constante en la Super Globe es la Universidad de Sydney, con sólo dos jugadores australianos y el resto europeos: una década fiel a la cita.