Nedim Remili estrena en Oporto su cetro de mejor jugador europeo
El lateral zurdo francés, reconvertido en central, es el máximo peligro de un Veszprem del que sale Biosca al Nantes.
La Champions League regresa esta semana, y en el grupo del Barça, su rival directo, el Veszprem húngaro, reaparece en Oporto con varias novedades: es dudoso que pueda jugar el español Agustín Casado, lesionado en el Europeo; ya es seguro que Nacho Biosca deja el equipo para enrolarse en el Nantes francés pese a los rumores que le situaban en el Barça donde ya jugó, y su sustituto ha llegado: Mike Jensen, el danés que ganó el Mundialito con el Magdeburgo y hasta ahora militaba en el Benfica. Por encima todo, el cetro de Nedim Remili, elegido en Alemania el mejor jugador del Europeo.
Remili (28) formado en el Creteille, ha pasado por el PSG y Kielce antes de llegar al Veszprem, donde en la liga local sigue con la misma inercia que con Francia, y fue el que guio a los suyos a derrotar al Tatabaya. En su origen era un lateral zurdo de casi 2,00 metros, de los buenos, pero no decisivo. De hecho en Francia tenía mucha competencia con Dika Mem y Richardson en su posición.
Saltó el PSG (con Raúl González) al Kielce polaco, donde Talant Dujshebaev tenía a dos zurdos con vocación de centrales, Remili y Álex Dujshebaev, así que optó por acondicionar al francés a la posición de central: “En el balonmano moderno los entrenadores buscamos jugadores polivalentes, y Nedim podía actuar de central, y así resentirse físicamente menos y ayudarnos más”. Pero la ayuda decisiva fue la salida del francés al Veszprem en un momento delicado en la tesorería de los polacos.
La realidad es que Remili se ha convertido en un jugador completo, le deja la posición de lateral derecho a Dika Mem, y así se hace con la titularidad como central para hacer diabluras con su lanzamiento. E impone una moda porque tres de los grandes equipos de Europa, el Kielce, el Barça y el Veszprem, por momentos se decantan por centrales zurdos, que no es lo habitual. Hasta ahora, eran los diestros los que daban en paso al centro, como Karabatic y el mismo Kikkel Hansen.