Jordi Ribera se apartó de su criterio

La convocatoria de Jordi Ribera había generado muchas expectativas por la cantidad de jugadores jóvenes, que al final se han quedado en seis debutantes en una gran competición. Dado que Ribera mantiene a rajatabla la participación de todos los jugadores... pero esta vez se ha saltado sus principios.

De los jóvenes, solo Ian Barrufet ha saltado en todos los partidos, con mucho protagonismo, apostando por él en ataque y defensa, bien de avanzado o en el centro de la defensa.

Carlos Álvarez, el último en llegar a la convocatoria por la lesión de Odriozola, ha ido de más a menos, de compartir la posición con Ferran Solé a no jugar ni un minuto contra Portugal, aunque se pueda justificar con la táctica inicial del equipo, y luego por la aportación de Solé.

Petar Cikusa, Gurri y Djordje Cikusa han tenido una aportación inferior a la prevista. Por ejemplo, Djordje jugó dos minutos ante Portugal, para hacerlo en defensa cuando Garciandia sufrió una exclusión. Petar, un central que ilusiona, apenas tuvo unos segundos. Gurri ha tenido más minutos jugando dos partidos, mientras que Víctor Romero no ha entrado en ninguna convocatoria.

Pero si los hombres jóvenes han tenido pocas opciones, entre los veteranos tampoco se ha visto la suficiente compenetración.

Casado es el hombre más importante de España. Central o lateral izquierdo, ha tenido más tiempo en la pista, incluso ante Noruega, cuando se veía que no estaba en mejor día.

Dani Dujshebaev es un jugador que se ha visto perjudicado en la rotación de los jugadores, sobre todo en el cuarto encuentro.

En el otro lateral, los 2,02 metros de Imanol Garciandia le han valido para ser un seguro. Con Álex Dujshebaev, por ejemplo, se ha visto reservado a las segundas partes, y no lo suficiente cuando parecía que era el encargado de tirar del carro, pero ese rol sólo se le vio en el encuentro ante Suecia, marcando el tanto del empate.

La portería tampoco ha rendido al nivel que se le pide, y los pivotes apenas han tenido peso en el juego ofensivo, quizá porque España han jugado mucho por el centro, pero con la primera línea­.