Histórica y colosal victoria del Granollers en Alemania

El Granollers soñaba con la hazaña, sus jugadores se animaban, querían competir ante el Flensburg, jugarse el pase a la Final Four de la Liga Europea en una hora de partido, pero...ninguno pensaba en que la realidad superaría al mejor de los sueños, porque el equipo vallesano maltrató al cuarto clasificado de la Bundesliga, que partía con un gol de renta (30-31) conseguida en España. pero que acabó frustrado con ese 27-35 en lo que representa la victoria más importante de un equipo español en los últimos diez años en Europa, porque el Barça gana a rivales de su liga, pero este choque era una especie de imposible, de un conjunto que pelea en España con siete jugadores de menos de 21 años, frente a otro surtido por internacionales europeos de primer nivel, con campeones del Mundo y de Europa en sus filas.

El equipo de Antonio Rama se plantó en el último cuarto del partido con once goles de renta, y una dinámica de juego excelente. Siempre serio en defensa, concentrado y descarado en ataque, con la portería aportado, era un bloque sólido. El Flensburg por su parte parecía una escuadra acomplejada, con unos jugadores desencajados, fuera de sitio, superados en ataque y defensa, viviendo la peor pesadilla de un equipo que sólo ha perdido dos partidos en 2023. Antonio Garcia (39 años), el laureado del Granollers, tiraba del carro (9 tantos) pero es que Faruk (18) desde el otro lateral no quería ser menos (9), aunque el liderazgo del veterano jugador fue especial por lo que significa su compromiso..

No era un partido, es el partido que todos estos jugadores recordarán el resto de sus vidas por la manera de conseguirlo, el lugar y las estrellas del rival. Ese triunfo colosal explica que Esteban Salinas (33) rompiese a llorar en el banquillo a falta de dos minutos, o que Amigó se intentase esconder para que no se le viesen las lágrimas, o que Rangel levantase al techo su cara enrojecida en la última parada del partido para asombro de un público atónito que ya tenía la entradas para esa Final Four de finales de mayo que se jugará, precisamente, en Flensburg.