El rival del domingo de España sale del polémico Suecia-Francia

La semifinal de Estocolmo de esta noche (21:00) está siendo controvertida más allá del deporte. La lesión de Jim Gottfridsson, la estrella local, el mejor jugador del pasado Europeo, el que lleva el peso de los suecos, ha sido un revés monumental para una selección que es la campeona de Europa y subcampeona mundial en este momento, y que pensaba que podía tener muchas opciones ante Francia, y jugar la final. El equipo que haga lo que España ante Dinamarca esta tarde en Polonia, sería el rival de los Hispanos el domingo.

Este es el quinto Mundial que organiza Suecia, aunque hasta ahora sólo ha conquistado uno (1954). Tenía fe en volverlo a hacer, pero sin su capitán, al que hoy no habían reemplazado, ya no son favoritos y se quitan presión con el que no hay nada que perder ante Francia, a la que acusan de estar preparando el terreno para justificar una eventual derrota,

Cierto es que los franceses llegan con problemas en el lateral izquierdo, con Nikola Karabatic, Prandi y Briet entre algodones, pero es que además han hecho causa común con los daneses, que no entienden tanto viaje y sin días de descanso. Remili aseguró que habían tenido que calentar para su partido de cuartos de final en los pasillos del recinto, porque el España-Noruega se disparó más de media hora por las prórrogas, pero lo que peor fue el viaje de ayer “a la mañana siguiente a Estocolmo sin haber dormido”. Dika Mem también habría dicho, como el danés Mathias Gidsel, que se merecen más respeto.

La otra parte de la polémica es el papel que representará Jim Gottfridsson en el banquillo de Suecia, donde Solberg no lo quiere “si no está para jugar”, pero la presión mediática está siendo terrible para que el capitán esté a pìe de pista con sus compañeros, entre los que está Eric Johansson listo al fin jugar ante Francia. El año pasado, en el Europeo, dio positivo por coronavirus en la víspera de la semifinal, y quedó recluido en su habitación durante tres días. La forma de festejar el título, recuerda ahora, fueron 27 horas de coche en la vuelta a casa desde Budapest. Confía en la que sus porteros, los más acertados del Mundial, Andreas Palicka y Tobias Thullin, le den la alegría que no pudo compartir en Hungría.