ATLETISMO PARALÍMPICO | MUNDIALES
Yassine Ouhdadi vale oro
El español, campeón en Tokio, gana en los 5.000 para completar un doblete extraordinario. Adiaratou, plata, suma la cuarta medalla para España.
Nada más cruzar la línea de meta, Yassine Ouhdadi empezó a repartir amor. Se abrazó con sus apoyos en las gradas y, acto seguido, con el maratoniano asturiano Alberto Suárez Laso, sexto a sus 45 años con un tiempo de 15:29.75. Ouhdadi le esperaba desde hacía varios segundos (15:16.97), como al resto de corredores. Este lunes, nadie pudo seguir al catalán de 28 años, como nadie le pudo seguir en los Juegos de Tokio, en los que se colgó el oro. En los Mundiales de Francia, ha repetido: campeón del mundo de atletismo paralímpico en los 5.000 (categoría T13 de discapacitados visuales), con billete para París 2024. Otro pedazo de historia a su nombre. Y ya van dos de los grandes de forma seguida. A los abrazos les seguían besos a la cámara. Para su familia, que tanto ha sufrido y tanto le ha hecho crecer.
En el estadio Charlèty de París, sus zancadas se sucedieron acompasadas, veloces. Ni el australiano Jaryd Clifford, que llegaba con la mejor marca de la temporada, pudo seguirlas. Le apretó tanto como pudo, con un ataque a 200 metros, pero se quedó a dos segundos (15:18.23). Suficiente para que Ouhdadi, que llegó a España desde Marruecos cuando tenía seis años, se volviera a coronar. Cómo lo merece. Con una ceguera total en el ojo izquierdo y una parcial en el derecho, debido a cataratas de nacimiento no operables, el atleta catalán, con ocho hermanos, creció en Tortosa (Tarragona). Sólo pudo estudiar hasta los 15 años, cuando se vio obligado a parar para echar una mano en casa, con una tienda de alimentación. No empezó en el atletismo hasta 2014. Lo hizo por ocio, pero el Comité Paralímpico Español pronto le seleccionó para el equipo nacional, con el que también logró una plata en los Mundiales de Dubái (2019). Hoy, subía al siguiente escalón. A lo más alto.
Adiaratou roza el mismo doblete
Ouhdadi cada vez brilla más en la historia del atletismo paralímpico nacional, en la que Adiaratou Iglesias, que también aseguró su presencia en los próximos Juegos, ya tiene unas cuantas páginas. Este lunes, añadió otra. Por milésimas, no fue de oro. Compartió tiempo (100 metros lisos, categoría T13) con la azerbaiyana Lamiya Valiyeva, que paró el crono en 11.99, pero se quedó un suspiro por detrás. Es su tercera plata mundial después de ser subcampeona por partida doble (100 y 200) en Dubái 2019. A todo ello, se suma el oro en Tokio en los 100 metros. La gallega rozó el doblete (oro olímpico y mundial) de su compañero Yassine y sumó la cuarta medalla para la España. Este domingo, la delegación estrenó su contador con los bronces de Joan Munar (salto de longitud, categoría T11) y Judith Tortosa (100 metros, frame running).