ATLETISMO | EUROPEOS DE MÚNICH
“Soy muy exigente y daré mi 120%”
Raquel González llega a los 35 km marcha (martes, 08:30) de Múnich como segunda del ranking europeo y tras firmar un sensacional quinto en el Mundial de Eugene.
Raquel González Campos (Mataró, 16 de noviembre de 1989) lleva cerca de veinte años ligada a la marcha atlética, esa especialidad de sufrimiento continuo y que se tiende (tendemos) a tener más presente en España cuando llegan las competiciones importantes estivales. “Es cierto que en invierno estamos más apartados de la pista cubierta, y a veces nuestra implicación no ve el retorno como ocurre si hay éxitos en grandes campeonatos de verano. Esperamos contar un poco más con ello porque la repercusión a través de los medios es muy importante”, dice la catalana a AS con elegancia primorosa horas antes de los 35 km marcha en el que participará junto a Antía Chamosa y Mar Juárez. En categoría masculina lo harán Miguel Ángel López, Marc Tur y Manuel Bermúdez.
Un certamen al que Raquel llega con el quinto puesto del Mundial bajo el brazo siendo allí la tercera europea clasificada y la segunda del ranking de 2022. Es decir... como firme aspirante a medalla. “Estar entre las favoritas supone una emoción y una motivación especial. Llego con muchas ganas e ilusión”, asegura aunque no piensa en un resultado concreto sino más bien en sensaciones: “Soy muy exigente conmigo misma y lo que quiero pensar es en darlo todo. Veremos qué pasa porque tengo muchas duras rivales aunque yo daré mi 120%, como siempre. Eso estará seguro”.
El año no comenzó bien con lesiones, tuvo mononucleosis... y sin embargo va por el mejor camino en resultados. Mucho trabajo para recolocar todo y rozar la medalla mundial antes de aterrizar ahora en Alemania. “A la concentración de EE UU ya llegaba más recuperada y estuvimos varias semanas concentrados en altitud, con entrenamientos mañana y tarde, y tanto física como psicológicamente hicimos un trabajo brutal. Se vio reflejado en Oregón y ojalá también se vea aquí. Cuando pasas las líneas de meta te vienen flashbacks de todo lo que te ha costado y la verdad es que este año ha sido muy duro, pero es cierto que tras cruzar la de Eugene valoré especialmente ese quinto. Mi entrenador (José Antonio Quintana) confía mucho en mí y en mi capacidad de ponerme muy rápido en forma. Es recíproco porque yo sé que él sabe planificar y adaptar muy bien la temporada al objetivo. Y esa combinación es clave para que las cosas estén saliendo”.
La española ha hecho 20, 35 y 50. ¿Con cuál se queda? “Me gusta batallar en todo tipo de distancias y no me quiero encasillar en ninguna. Este año hemos decidido hacer esta apuesta diferente por los 35 con gran resultado, pero no descarto el 20 en el futuro. De hecho para los Juegos de París 2024 de momento están las dos. Yo voy año a año y planteándome las distancias cuando empieza la temporada”. ¿Y cómo ve el debate sobre las similitudes entre ambas tras desaparecer el 50? “En Eugene se vio que el 20 y el 35 son más parecidos de lo que se presumía. Es casi el doble de distancia, pero se ha visto que el 50 era una prueba de resistencia mucho más dura y que la gente va muy rápido en el 35″.