ATLETISMO | EUROPEOS INDOOR EN ESTAMBUL
Mechaal es de plata
El español se bate de tú a tú con Ingebrigtsen que sólo le pudo desenganchar a falta de setenta metros. Doblete del noruego y primera medalla de España.
A los 22 años Jakob Ingebrigtsen ha ganado el oro en los 3.000 metros de los Europeos indoor de Estambul. Segundo doblete consecutivo tras Torun 2021 en 1.500 y 3.000; y undécimo título continental... además de oro olímpico y mundial al aire libre. Esta frase es rotunda para poner en tesitura el nivel del atleta del que estamos hablando. “Es un monstruo, casi inhumano. Está a base de plátanos porque no le gusta la comida del hotel... a ver si le entra una diarrea (ríe). Sinceramente es la única manera de debilitarlo”, reconocía Adel Mechaal (32) a AS en la previa.
El barcelonés nacido en El Jebha (Marruecos), que llegó a España con dos años y obtuvo la nacionalidad en 2013 tenía entre ceja y ceja ponérselo muy difícil al noruego en la ciudad en la que reside. “Mi deseo es que no pueda celebrar la victoria o al menos que tenga que esprintar hasta el último metro”, anticipaba. Llegaba el momento de la verdad. Disparo y quince vueltas por delante. Primeros 200 y el dúo ya comandaba la prueba con una mirada directa a los ojos entre ellos.
Mechaal por dentro, Ingebrigtsen por fuera. Una vuelta más y Jakob decidía comenzar su cadencia imposible. Esa que únicamente parece poder aguantar el caucásico africano, ese vikingo nórdico sin piedad que se desplaza a velocidad supersónica sin aparente esfuerzo como si deslizara por una cinta mecánica de un centro comercial es un atleta biónico, una máquina estudiada y perfectamente preparada para derrotar al resto de los humanos. Era el momento de apretar los dientes y seguirle para Adel. Su objetivo era derrotarle, pero también sabía que pegarse a él podía asegurarle la medalla.
Primer kilómetro en 2:41.87. Las vueltas pasaban y el guion era el mismo... aunque el grupo cada vez estaba más estirado y empezaban a caer rivales de maduros. El segundo mil se pasaba 2:34 para un agregado de 5:15.53. Se acercaba el momento definitivo e Ingebrigtsen seguí con sus habituales cambios brutales de ritmo... sin parecerlo. Tercera, cuarta, quinta... y casa vez menos piernas cerca. Siempre las de Mechaal, eso sí.
Última vuelta vuelta y el podio era cosa de tres. Ingebrigtsen, Mechaal y el serbio Bibic. Toque de campana y el duelo era a dos. Jakob apretaba, Adel resistía... hasta que a falta de setenta metros ya no pudo más. Oro para el rey con 7:40.32. Plata para Mechaal con 7:41.75. Primer medalla para España en los Europeos. “El atletismo no son matemáticas, pero a veces hay que ser consciente de las cosas”, avisaba Mechaal. Con Ingebrigtsen sí funcionan. Gana siempre.
Tras lograr la plata, Mechaal atendió a las preguntas de AS
-No ha podido ganar a Ingebrigtsen, pero al menos le ha llevado al límite hasta casi el último metro....
-Ese era el objetivo. Jakob está muy superior. La idea era plantarle cara y creo que lo ha hecho. He logrado que a falta del toque de campana la gente pensara que le podía ganar y no olvidemos que estamos hablando del mejor atleta de la historia de Europa y va camino de serlo también a nivel mundial.
-¿Ve posible batirle en el futuro?
-Hemos cambiado nuestro sistema de entrenamiento, lo estamos perfeccionando y ojalá pueda derrotarl oen el futuro en su propio juego.
-¿En qué consiste?
-Es el sistema que usan los noruegos. Todavía nos faltan descubrir algunos secretillos que ellos tienen sobre cómo afrontar las últimas tres semanas antes de la competición. El sistema está genial y aunque como digo aún nos falta yo voy mejorando mismarcas. Hace que construyas una base aeróbica sencillamente espectacular trabajando siempre al límite. El sistema es muy biueno pero no olvidemos que además se ha juntado que él es un portento porque los dos hermanos lo han seguido igual y están muy lejos de su nivel. Estamos todos un poco cansados de que gane siempre y hay que intentar ponérselo difícil.
-¿Ha pensado que podía ganarle aquí?
-Yo tenía confianza en mí, en mi último mil, lo hemos hecho en 2:24. Sé mis posibilidades y mis limitaciones y dentro de lo que tengo ahora he dado lo mejor pero Jakob es mejor que yo”.