España firma dos sextos puestos con Rosa María Lara como protagonista

Con noche aún cerrada en la Estación de Canfranc y 4ºC de temperatura, un total de 302 ultra trail runners (179 hombres y 123 mujeres) protagonizaron a las siete de la mañana la salida de la prueba más larga del Mundial de CanfrancPirineos. Por delante, 81,2 kilómetros y 5.413 metros de desnivel, todo repartido en un terreno variado, técnico y exigente. Un terreno continuo sin apenas descansos para los participantes y corte máximo para llegar a meta estipulado en 15 horas.

El argentino Marco Augusto Vidoz lideró los primeros compases de la carrera junto al francés Bouillard y el japonés Hiroki y los españoles, tanto hombres como mujeres, se mantuvieron tranquilos y guardando fuerzas.

Tras pasar por crestas espectaculares, el Ibon de Truchas (kilómetro 40,3) marcó el ecuador de la carrera. Después de este, el recorrido transcurrió por el Parque Nacional de los Pirineos donde Jim Walmsley (4:22:57) se adelantó por unos segundos a los dos franceses que no daban tregua. Claudio Díaz se colocaba 25º, cuatro puestos mejor que en Formigal, Manuel Anguita (26º, dos mejor) y no muy lejos les seguían Julen Calvó (37º), Abel carretero (46º) y Berrizbeitia (48º).

En tierras galas, comenzando la segunda y decisiva parte de la carrera en el Coll D’Ayous (km 46,8), no hubo cambios en la cabeza (4:51:57) con los tres escapados al igual que en mujeres con la estadounidense Schide (5:30.09) manteniendo una amplia ventaja, y Rosa María Lara asentada en la quinta plaza.

Ya en el descenso hacia el último punto de avituallamiento (kilómetro 71,8), llegó la última subida de la carrera, poco más de un kilómetro hacia el Collado de Estiviellas, donde el estadounidense Walmsey (8:00:40) inició el rápido y vertiginoso descenso hasta la meta llegando campeón a lo grande con un tiempo de 8:35:51, logrando su segundo título mundial. Por detrás llegaron juntos los franceses Roubiol (campeón mundial en Innsbruck) y Coiffet.

En el apartado de españoles, el granadino Manuel Anguita fue 20º (9:46:10), Julen Calvó 23º (9:53:11), Claudio Díaz 29º (10:04:21), Pello Berrizbeitia 42º (10:20:21) y cerrando el quinteto Abel Carretero, con muchos problemas musculares (55º 10:38:24). Lograron firmar la sexta plaza final (29:43.42) de gran mérito dado el altísimo nivel y calidad de los participantes, a sólo 17 segundos de Gran Bretaña. Francia ganó el título mundial a lo grande (26:54:20), Estados Unidos logró la plata (27:37:48) y el bronce fue para Italia (27:59:06).

El final de la prueba femenina tuvo a Schide como gran protagonista. Triunfó con un registro de 9:57:59, logrando una diferencia de más de 25 segundos con la nepalí Sunmaya Budha. La italiana Fabiola Conti acabó tercera.

Por su parte, la alicantina Lara sufrió mucho con el tramo final de bajada pero terminó completando la mejor carrera de su vida con un quinto puesto en el Mundial (10:47:15), llegando a ir cuarta durante muchos kilómetros y mejorando el 11º puesto logrado hace dos años en Innsbruck.

Tras Lara llegaron en 26ª posición Inés Astrain (11:48:35), 32ª Gemma Arenas (11:56:11), 34ª María del Mar Pastor (12:13:03) y cerrando el quinteto español Bárbara Ruiz 38ª con 12:21:10.

En la modalidad femenina, Italia se proclamó campeón del mundo (32:36:17) por delante de Estados Unidos (32:49:30) y Francia (32:59:06).

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