Atletismo | Mundiales en Tokio

España dispara la ilusión con Lescay, ‘Aerolíneas War’, Ben y Llopis

Los saltadores de longitud brillan con 8,21 y 8,13; y el gallego en 1.500 sellan sus pases a la final, mientras el velocista da una exhibición en las series del 110 vallas.

Lester Lescay (foto Sportmedia/RFEA)
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Rafa Payá
Nació en Madrid (1976). Licenciado en Derecho con un master de postgrado en periodismo deportivo. Entró en AS en 2004 en Más Deporte para pasar a motor (15 años) y en 2020 regresó a poli donde hace atletismo, golf, deportes olímpicos... Ha cubierto deportes de motor (F-1, MotoGP, Fórmula E...), europeos y mundiales de atletismo, y eventos de golf.
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“Si tengo salud lucharé por todo”, decía Lester Lescay Gay a AS nada más recibir la aprobación final de su tramitación de licencia por parte de World Athletics para representar a España. En su debut en Apeldoorn se colgó un bronce europeo en pista cubierta con 8,12. En Tokio ha volado hasta 8,21 en el segundo intento de la clasificación de longitud, un brinco de los que es capaz cuando está bien físicamente. Con una batida perfecta, +0.1. Billete dorado a la final (miércoles, 13:50 en España). Despertando de un plumazo una ilusión por una medalla.

“Estoy muy bien desde hace tiempo, pero no me había salido un salto largo justamente por la tabla. O me quedaba demasiado atrás en la batida o hacía nulos Y mira, ha salido el perfecto en el Mundial. Espero que el miércoles lo pueda repetir”, afirma Lester en zona mixta. Una final en la que también estará Jaime Guerra (8,13), primera vez en la historia mundialista con dos españoles, junto a toda la pléyade de grandes especialistas del salto horizontal comandados por el griego Tentoglou, el italiano Furlani, el jamaicano Gayle (el único que superó a Lescay con un brinco de 8,28), el sueco Montler, el búlgaro Saraboyukov, el chino Shi... “Sólo quedamos doce; ahí ya podemos ganar cualquiera. Ellos estarán bien, yo estaré bien, y el mejor del día será el que se lo llevará. No tengo miedo a nadie”, afirma Lester a AS.

Lescay reconoce que le gusta el pasillo, la arena y el estadio: “Aquí fue donde debuté ‘como mayor’, con 19 añitos. He llegado a la pista y me he sentido como en casa”. Sobre si habría preferido saltar un poco menos (se entró en la final con 7,98) y haberse ‘guardado’ el 8,21 es rotundo: “No, no, no. Sé que tengo más, otra cosa es que salga en la final”. En esas está también el barcelonés Guerra, ‘Aerolíneas War’ (25 años), el hombre de los muelles por tobillos al que las lesiones le llevan condicionando su prometedora carrera. “No me he encontrado genial, no sé si por los nervios o la tensión, pero aun así me he sacado un 8,13 de la chistera. En la final voy a hacer todos los saltos como ese tercero; y si sale y engancho un 8,30 quizá valga para medalla. Espero estar más tranquilo en la final y puedo fluir”, aseguraba el catalán.

La ilusión que despertaron Lester y Jaime (segundo y quinto totales) la continuó al mismo nivel Quique Llopis, como se esperaba. El valenciano dominó su serie del 110 vallas de manera espectacular desde la calle 1. Victoria dejándose llevar con tremenda facilidad en 13.22... en una serie 4 con el gran favorito, el norteamericano Cordell Tinch (13.31). El martes será el momento de seguir demostrando hasta dónde puede llegar con la disputa de las semifinales (13:40 en España) ojalá que también esté presente en la final (15:20). “Sensaciones muy buenas y objetivo cumplido por hoy. Ahora toca recuperar y repetir todo para entrar en la final. Y ahí ya veremos...”, explicaba serio y concentrado. Mucho peor le fueron las cosas a su amigo Asier Martínez. Séptimo en la serie 3 con 13.63. Eliminado. “Me encantaría tener algo a lo que agarrarme, pero no hay nada. Venía para hacer algo decente, pero no lo he conseguido”, afirmaba cabizbajo y muy triste el bronce mundialista en Eugene 2022 y oro europeo en Múnich 2022.

Y como no hay dos sin tres, llegó otra gran alegría en el 1.500 con el brillante pase de Adrián Ben a la final del miércoles (15:20 en España). Tercero en su semifinal, con 3:36.78, midiendo a la perfección tiempos y esfuerzos. En su debut planetario en la distancia. “Estoy orgullos y en la final voy a por todas, como siempre. Una vez allí tengo opciones de cualquier cosa. Ahora toca descansar, recuperar y que llegue el miércoles”, decía el gallego en zona mixta”. De los favoritos no estarán entre los doce elegidos el noruego Nordas, el alemán Farken y, por supuesto, el ogro Jakob Ingebrigtsen, eliminado en series. “El rey”, para Ben pese a no tenerle como rival en esta ocasión.

Otras eliminaciones.

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Marta Serrano, pese a batir el récord de España Sub-23 en 3.000 obstáculos con 9:21:00; y Daniela Fra, 400 vallas tras un mal día y estar “descentrada”, caían eliminadas en la jornada matinal nipona. Por la tarde, Jesús David Delgado abría la nómina de españoles que buscaban acceder a diferentes rondad en la vespertina. ‘El Flako’ corrió la misma suerte que sus compatriotas femeninas al ser séptimo en su serie con 48.98 (él tiene 48.45 como plusmarca nacional). Eso sí, pese a no mejorarse a sí mismo, consiguió la mejor marca española en la historia de los Mundiales que tenía José Alonso con 49.00 desde hacía 38 años.

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