El marciano que cuidaba cabras, corría descalzo y “nunca” sufre

La ‘Ciudad del Viento’ y, por ende, el mundo del atletismo, ha alucinado con la exhibición del keniano Kelvin Kiptum (23 años) arrebatándole la plusmarca universal a Eliud Kipchoge. Su 2h:00:35 a una media de 2:50 el kilómetro y 21,240 km/h coloca su gesta en un lugar prioritario en las hazañas deportivas de la historia. Tres maratones disputados (Valencia 2022, Londres 2023 y Chicago 2023) y tres victorias... con tres de las seis mejores marcas de toda la historia. Pese a su increíble desempeño, Kiptum era humilde en meta: “Eliud Kipchoge es el mejor de siempre”.

Eso sí, también reconocía que en su cabeza el hito estaba muy presente... y que podría superarlo: “Cuando era pequeño veía a Kipchoge entrenar y me decía, ‘un día seré como Eliud’. Él fue un ejemplo para nosotros. Sabía que en algún momento yo conseguiría ser el más rápido del mundo aunque reconozco que no pensaba que fuera esta vez”. El africano, que entrena cerca de su pueblo natal, Chepkorio, a unos cuarenta kilómetros de Eldoret, la meca del atletismo keniano, está dirigido por el ruandés Gervais Hakizimana. Y el exatleta, que ahora reside en Francia, ha revelado cosas curiosas de Kelvin en AFP: “Hacíamos sesiones de cuesta en el bosque cerca de su casa. Él era pequeño pero nos seguía, descalzo, después de cuidar de las cabras y las ovejas. Eso fue en 2013, en realidad aún no había empezado a correr”.

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Kiptum empezó a correr con regularidad en 2016 y tras dos triunfos, en apenas quince días, en las medias maratones de Copenhague (1h:00:48) y Belfort, Francia (59:53) comenzó a soñar con la distancia de Filípides (42.195 metros). “En 2020 la pandemia me encerró en Kenia, me quedé allí un año y le entrené en el bosque. Corrí con él y luego empezamos un programa de maratón en 2021″, explica Hakizimana.

Sus resultados han demostrado un talento increíble para esta prueba... no exento de gran trabajo de acumulación ya que recorre una media de 250 km semanales, “a veces más de 300″ relata el preparador, muy por encima de los 180-220 de Kipchoge... que ya de por sí son una absoluta barbaridad. “Le he sugerido que afloje el ritmo, pero no quiere, me hablaba todo el tiempo del récord de Eliud. A este ritmo corre el riesgo de romperse”, finaliza Hakizimana.

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Kiptum ya tiene su récord mundial, pero también su siguiente objetivo: “Mi mente está en París 2024. Es mi sueño, siempre tuve como gran aspiración competir en los Juegos y espero tener la oportunidad de representar a mi país”. Una cita en la que se medirá cara a cara frente a Kipchoge, que buscará su tercer oro olímpico consecutivo en maratón. Eso sí, viendo el nivel de Kiptum y su aparente facilidad para cambiar de ritmo e ir robando segundos al crono en la parte final de las carreras la leyenda de la distancia lo tendrá difícil. “Nunca he sentido sufrimiento en una maratón”, afirma el nuevo icono.

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