ATLETISMO | MUNDIALES EN BUDAPEST
Drama en el 10.000 femenino
Sifan Hassan se va al suelo a veinte metros de la meta cuando peleaba por el oro con la etíope Tsegay. El país africano copa el podio en Budapest.
Sifan Hassan está acostumbrada a gestas que desafían la lógica. La neerlandesa, nacida en Etiopía hace 30 años, tiene una potencia y versatilidad únicas en el atletismo. Y lo mismo es capaz de correr la Maratón de Londres como de pulverizar el récord europeo de 5.000. En los Juegos de Tokio consiguió dos oros y un bronce en 1.500, 5.000 y 10.000... algo que esperaba repetir Budapest tras fracasar en Oregón.
Y todo parecía indicar que sería así... hasta que llegó el drama. Hassan llegaba a la vuelta final plena de potencia, pese a correr y ganar su serie de 1.500 por la mañana, y así quiso demostrarlo con un ataque largo desde 300 metros. Fue dejando adversarias atrás salvo a la etíope Gudaf Tsegay. Ambas protagonizaron un esprint por el oro que por momentos parecía decantarse para un lado o el otro. Sin embargo faltaba el golpe de teatro.
En plena pelea y llevando su cuerpo al límite... Hassan se fue al suelo quedándose sin medalla (se levantó y fue undécima) y puso en bandeja el triplete para Etiopia: plata para Letensenbet Gidey y bronce para Ejgayehu Taye.