Raúl Entrerríos se convierte en una leyenda en activo

En Asturias, su tierra, como dice Alberto Suárez, su descubridor,  de Raúl Entrerríos se le definiría con un es un paisano, calificativo de alto valor riguroso. Y aunque quiso ser fiel a su sobriedad de siempre, se emocionó en el acto final que le tenía preparado la Federación Española al término del amistoso ante Argentina: 28.24 (13-14),. Su partido 281 fue como casi todos los que ha jugado desde 2003 cuando debutó: alguna acción ofensiva individual para mantener la atención de la defensa y mucha generosidad con sus compañeros. Nada cambió, ni el día que se ha convertido en el jugador que más veces a defendido la camiseta española.

Este partido ante Argentina sirvió para muchas cosas más allá del juego, para honrar la memoria de Juan de Dios Román, de Ernesto Enríquez y de Claudio Gómez, personas importantes en el balonmano, desaparecidas el año 2020; también para homenajear a la propia Selección que jugó ayer su primer partido en España tras el título Europeo en 2020; y luego, para subir al olimpo de la leyenda a Raúl Entrerríos.

Y entre medias un partido que España ganó ante una Argentina que lo puso complicados, que tuvo cuatro goles fe ventaja, pero que acabó perdiendo ante unos Hispanos que tuvieron que ponerse el mono. Lo curioso es que en los prolegómenos se homenajeó a Álex Dujshebaev por sus 100 internacionalidades, y quizá entre tantos actos el suyo quedase orillado en lo que realmente significó el partido; cuando Raúl o Álex tienen el balón en la mano siempre pasan cosas, se puede esperar la inspiración de estos dos genios, y si Entrerríos está en su despedida, Dujshebaev está llegando a su madurez a los 28 años, doce menos que el capitán. Entre ambos tumbaron a Argentina. El resto es anécdota en un partido entretenido de dos selecciones que cumplieron un buen papel..