Ona Carbonell: "Ojalá mi legado sea de medallas y valores"

En el verano de 2019, en Corea, Ona Carbonell (Barcelona, 30 años) se convertía en la mujer con más medallas mundialistas en la historia de la natación (23). Poco después, anunciaba en una emotiva carta que dejaba su deporte, la sincronizada, para cumplir uno de sus grandes sueños: ser madre. De esta manera, se perdía los Juegos... en teoría. El pasado mes de agosto nació su hijo, Kai (mar en japonés), y con el aplazamiento de Tokio 2020 por la pandemia se abría una opción para que Ona estuviese en su tercera cita olímpica.

“Al mes y medio de parir ya me estaba entrenando en la piscina. Kai sólo bebe leche materna, algo exclusivo que no hemos visto en muchos casos en el deporte de élite. Nos estamos adaptando. Por la noche me despierto tres o cuatro veces. A las 6 doy de mamar y a las 6:40 salgo de casa para estar entrenando en el CAR de Sant Cugat hasta las 13:30", repasa sobre su día a día. El cansancio obviamente ahora es mayor, pero logré medallas en Juegos, Mundiales, Europeos... y sin duda la mejor de todas es mi hijo”, dijo la catalana en un acto de Mazda en Madrid. España tendrá el Preolímpico en mayo y, si todo va bien, el equipo de sincronizada estará en Tokio.

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“Con el aplazamiento del Preolímpico, nos permitió tener un par de meses para preparar la cita al máximo nivel. Todavía no me entreno al ritmo de mis compañeras. Aún falta para que llegue la mejor Ona, pero trabajamos para lograrlo. Ahora me siento muy madura”, destaca. Sobre la maternidad, considera que es un tema tabú en el deporte de élite femenino. “Existe mucho miedo entre compañeras y otras deportistas. Yo también lo tuve, si no hubiese sido madre antes. Ahora me gusta visibilizar mi caso, porque las mujeres podemos con todo. Tenemos que evolucionar mucho”, apuntó.

Sobre su futuro, Ona observa su retirada “más pronto que tarde”, pero no quiere poner fecha. "Me gustan los retos y voy a por ellos. Es importante que los deportistas tenemos que prepararnos para ese momento, ya que llegará más pronto que tarde, pero también aprendido durante este tiempo a transmitir los valores aprendidos durante mi carrera. Ojalá mi legado, cuando cuelgue el bañador, sea de medallas y valores”, deseó.

En 2018, Ona Carbonell se impuso en Mastercelebrity, un programa que admitió que le cambió desde entonces su alimentación y su gusto por la gastronomía. "Puede que algún día estudie algo más sobre cocina". Ahora está a un paso de ser Diseñadora, ya que está cerca de terminar su carrera. "Este año con la maternidad y los Juegos lo he apartado, pero me queda muy poco: una asignatura y el trabajo final. Espero algún día poder crear mi marca personal. Es un mundo que me gusta y quién sabe si me podría dedicar en un futuro", añade una Ona que "ahora más nunca" quiere llevar un estilo de vida minimalista.