Biec es el único español en la locura del patinaje extremo

Velocidad, caídas y mucha adrenalina. Es a lo que está expuesto hoy y mañana José Antonio Biec (Jaca, 1977), el único español en el Mundial Red Bull Crashed Ice de Landgraaf (Holanda), una prueba donde 164 patinadores, divididos en series de cuatro, descenderán por un estrecho tubo lleno de curvas y baches durante cerca de 400 metros en los que alcanzan los 60 o 70 km/h. Pasan a la siguiente fase los dos primeros y hay que clasificarse como sea. Eso sí, sin contacto. "Es una combinación explosiva, hace falta una buena salida, equilibrio y mucha velocidad".

Esta será la cuarta prueba en unos Mundiales de José Antonio, un delantero del Jaca y de la selección nacional de hockey hielo, que fue reclutado en 2009 para esta disciplina extrema. "Buscaban a alguien en España grande (mide 1,87 y pesa 90 kilos), que manejase patinaje y descenso Y dieron conmigo", cuenta el oscense, que relata el crecimiento de este espectacular deporte. "En Minnesota había 115.000 espectadores. Los competidores son muy profesionales". La estrella es el canadiense Kyle Croxall, de 2,00 m. y 110 kilos.

Pese a que no esta permitido el contacto en el Crashed Ice, las caídas son el pan de cada día. "En una de cada dos carreras alguien va al suelo", dice el capitán del Jaca, que reconoce que se producen muchas lesiones. "Se rompen tibias, ligamentos, tobillos, clavículas... No puedes empujar, ni tocar, lo que pasa es que el tubo se estrecha y hay que ganar la posición. Pero es cierto que los golpes son duros".

Sus compañeros del Jaca, once veces campeón de Liga, le tachan "de loco perdido". "A mí me gusta muchísimo. La sensación que tienes allí es de un deporte muy serio y exigente. No somos cuatro zumbados", continúa Javi, que, además de deportista, es gerente de una empresa familiar.

La de Holanda será la tercera cita de los Mundiales, en el SnowWorld de Landgraaf la estación cubierta más grande del mundo. "Será muy técnica y se esperan 40.000 personas, un ambientazo". Allí estará Biec, el apasionado pionero del patinaje extremo en España.