España promete honradez total pese al deseo de la afición
España se enfrenta a Brasil (21:00, La 1) en un partido rodeado de polémica: el camino hacia la final será más fácil para el que pierda. El ganador debería cruzarse con EE UU en semifinales.

Lo dijo Pau Gasol nada más caer contra Rusia y lo repitieron ayer Scariolo y el presidente Sáez: "España no saldrá a perder contra Brasil". La Selección llega al último partido de la fase de grupos en una encrucijada: la victoria le colocaría a Estados Unidos en semifinales, mientras que la derrota le quitaría al gigante del camino hasta una hipotética final. Para un equipo que llegaba a Londres con la final como único destino, la tentación acecha, pero ellos defienden su honestidad. Y así debe ser.
Sin embargo, la afición no está de acuerdo. Según una encuesta de AS.com, el 65% de los 30.467 votantes se dejarían ganar por Brasil. En su mente pesa lo sucedido en los Juegos de Atenas 2004, cuando España no especuló pese a que el liderato implicaba un cruce con EE UU en cuartos de final que, a la postre, resultó funesto. Pese a todo, José Luis Sáez respondió con contundencia a través de Twitter: "Si mi país me llama a perder, yo no me identifico con él. Lo siento, pero los valores no se pierden".
El rival. Y dando por buena la honestidad de ambos equipos, conviene recordar dos cosas. Primero, que Brasil está repitiendo las mismas promesas, pero su situación es calcada a la de España. Segundo, que cuentas aparte, es un equipo con recursos para ganar a la Selección, con un juego interior NBA (Nené, Splitter y Varejao) capaz de competir centímetro a centímetro con los Gasol e Ibaka y con un Marcelinho Huertas en estado de gracia. Hoy estarán todos bajo la lupa.