El Ademar pierde por la mínima en su visita a Oporto

Los leoneses siguen sin conocer la victoria a domicilio en 2011 en un partido en el que, salvo en la primera parte, fueron superados por los lusos que supieron explotar a la perfección las pérdidas de balón para martillear al contragolpe ante el mal repliegue defensivo ademarista.

Al menos, Ademar pudo llevarse un resultado que puede enjugar el próximo sábado en su pista, porque la situación llegó a complicarse sobremanera cuando a falta de poco más de diez minutos los locales llegaron a escaparse con su máxima renta, 23-19.

El arranque de garra con dos goles del joven Ángel Montoro, que después pagaría su inexperiencia en los segundos finales con un lanzamiento precipitado, permitió tener incluso opciones de haberse llevado un empate que quizá no habría merecido.

En esta ocasión, el técnico Jordi Ribera quiso jugarse la baza de la sorpresa y después de haber dejado fuera de la convocatoria al internacional croata y máximo goleador del equipo, Denis Buntic, dio toda la responsabilidad a jugadores que suelen ser la base del filial que milita en División de Honor B.

La ausencia de los tres centrales del primer equipo -Cutura, Ruesga y García Vega- permitió que el técnico catalán diera la batuta de la dirección del juego al internacional júnior Juan Castro que debutaba en este encuentro con Reale Ademar y al que se vio voluntarioso, pero algo acelerado.

Hubo incluso muchos minutos en los que Ribera contó con una primera línea hasta hace poco tiempo del filial, con Castro, Montoro y Goñi, que dio resultado con ventajas de dos goles, hasta que en los últimos diez minutos tomó la delantera Porto para ya no perderla hasta el descanso, 14-13, con gol polémico anulado a Montoro en el último segundo.

La segunda mitad sirvió para que Ademar sacara todos sus fantasmas, a pesar de que la irrupción de Chernov en ataque permitió el espejismo momentáneo del empate que se vino abajo en cuanto los lusos explotaron el contragolpe ante tantas facilidades visitantes.

Con un Jordi Ribera probando todas las opciones tácticas posibles, pero en la segunda parte confiando más en los veteranos, Ademar fue capaz de enmendar la plana cuando peor le pintaban las cosas (23-19, minuto 49) mejoró en defensa y de los balones recuperados llegó el acierto de Montoro para reducir la diferencia.

Incluso Ademar pudo haber soñado con lograr un mejor resultado, pero entre su precipitación y una pena máxima encajada acabó perdiendo por la mínima 26-25, un resultado que en León es factible de superar para alcanzar los cuartos de final de la Copa EHF.