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Primera | Espanyol

El vestuario del Espanyol sigue sin cobrar lo pactado

Maximiliano Rodríguez.
CARLOS MIRA

No pasa una semana en la que el vestuario del Espanyol no salga decepcionado con el director general del club, Josep Lluís Marcó. Ayer, un nuevo episodio. El ejecutivo bajó al vestuario para hablar con los de Luis Fernández y dar explicaciones a un nuevo retraso en los pagos. Una lástima, más teniendo en cuenta la reacción que están teniendo los jugadores y que les da vida aún para seguir soñando con la permanencia.

El vestuario está muy disgustado con la falta de palabra de Marcó. Hace dos semanas el equipo pudo leer en la pizarra del vestuario un mensaje en el que se informaba de que la mitad del dinero que se adeudaba se pagaría el 20 de abril. Ese mismo día, volvió a aparecer un mensaje en el tablón del vestuario, pero éste era más grave, ya que aseguraba que de lo adeudado sólo se cobraría la cuarta parte. Pero ni eso.

Por su parte, Luis Fernández no quiere dar pistas del equipo que puede alinear mañana en el Camp Nou. Ayer practicó a puerta cerrada. En principio, el francés, que tiene sancionado a Iván de la Peña, situará a Maxi Rodríguez, el fichaje más caro de la historia del club, en la banda izquierda. Él y Mustafa Hadji, que está rindiendo a un nivel excepcional, serían los encargados de asistir al capitán Raúl Tamudo.