Y parece que fue ayer

Hace cinco años iba en metro, ahora en coche; soñaba con jugar en el primer equipo y se ha hecho realidad. Han cambiado muchas cosas en mi vida, pero parece que fue ayer cuando ganamos en Nigeria. Fueron días difíciles, tuvimos que ver demasiada pobreza, pero hicimos grupo, jugamos bien y ganamos. De vez en cuando me encuentro con la medalla en uno de los cajones de mi armario y se vienen a mi mente momentos concretos: las semifinales, la final, las lágrimas, el compañerismo, el buen rollo o la visita a los caimanes, ¡alucinante!

Me gusta encontrarme con algunos de los compañeros de aquellos días. Mantengo más contacto con Xavi, pero también están Marchena, Yeste o Aranzubia... Es bonito ver cómo la mayoría de los que estuvimos en Nigeria hemos llegado lejos. En aquella concentración hablábamos de lo que nos esperaría en el futuro, y la mayoría hemos cumplido nuestras expectivas. Han pasado cinco años de mi vida, pero vivo el fútbol con la misma pasión que cuando era un chaval con muchas ilusiones en la mochila.