NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Dakar 2004 | 2ª Etapa

José María Serviá llegó líder a casa

El catalán refrendó que es el favorito español en la categoría de automóviles.

<b>LÍDER</B>. Serviá llega a tierras españolas como líder.

Todavía la historia no va en serio pero, por si acaso, José María Serviá ya ha dado primero, por aquello de que quien se adelanta suele golpear dos veces. El piloto español se alzó, al volante de su buggy Schlesser, con la victoria en la segunda etapa de este Dakar 2004, con final en Castellón, la primera en la que el cronómetro tuvo algo que decir. Fue sólo una especial de 25 kilómetros antes de partir rumbo a España (500 km de enlace), pero el barrizal en el que se había convertido el tramo de Narbona originó tantas dificultades que hubo de ser neutralizado para los coches después de que se cruzara en el camino Claude Arnaux. El francés (nada que ver con René) no dejaba con su coche atravesado que pasaran los demás.

En motos, el ganador fue un francés, David Fretigne, nada fuera de lo habitual de no ser porque lo hizo con una Yamaha de dos ruedas motrices, y Nani Roma asomó la cabeza con un tercer puesto porque ni adrede sabe ir despacio. Y en camiones, nadie, porque tan mal estaba el piso que el tramo tuvo que ser cancelado.

En una carrera de 11.052,5 kilómetros (5.425,5 de especial y 5.628 de enlace) lo que determinen los 25 primeros no supone gran cosa, pero José María Serviá ya goza de un minuto de ventaja sobre gente como Masuoka o Vatanen. Y a eso hay que sumarle el gustazo que supone llegar líder de la caravana a España.

Con nueve dakares a sus espaldas, el hermano pequeño de Salvador ya había degustado esa sensación con anterioridad, pero no por ello deja de ser una inyección de moral, algo que notó sobre todo en la parada técnica que hizo en Salt, para darse un último abrazo con su familia. La gente le ve como la gran esperanza española para hacer algo grande en coches y se ha marcado como objetivo acabar en el podio de las playas de Senegal, sin descartar incluso una gesta mayor.

En cuanto a las dos ruedas, ya hay uno de los favoritos a la victoria final al que se le ha torcido el gesto. El italiano Fabrizio Meoni, bicampeón de la carrera más dura del mundo, perdió un minuto respecto a Roma y Sainct, más otros dos respecto a Despres. Se le vio enfadado manchado de barro y echó las culpas a partes iguales a su mecánica y a su pilotaje.

Todos los pilotos, sobre todo los españoles, recibirán hoy un baño de multitudes en la arena de la playa El Espinar de Castellón, aunque eso no les cogerá por sorpresa después de ver lo poblados que estaban los puentes de la autopista A-7 con el único objetivo de jalearles. El Dakar tiene tirón allí dónde va y la fiesta no ha hecho más que empezar, pero aquí está mas carca que nunca. ¡A disfrutarla!