Moya también gana como team manager

Si no cambian las cosas, sólo un español se va a encontrar plenamente satisfecho cuando pasadas la una y media el Mundial de rallys finalice en el tramo de Margam Park. Será Luis Moya, que tras lograr dos títulos como copiloto de Carlos Sainz, está a un paso de lograr el primero como director deportivo de Subaru junto a Petter Solberg.

Precisamente fue en esa especial en la que saltó a la fama aquel día que se lió a patadas con el coche que les había dejado tirados a Carlos y a él a quinientos metros de el que hubiera sido su tercer título. "No me hace ninguna gracia que también ahora el rally acabe allí. Espero que esta vez no pase nada", aseguraba ayer el gallego.

Luis está sorprendido con el que probablemente hoy se proclame campeón: "Hay una cosa que me parece asombrosa de Petter. Le estamos marcando las diferencias en los parciales, y él siempre nos dice que regula según lo que le decimos. Pensaba que era un farol, pero en los tramos en los que no hemos tenido parciales es en los que mayores diferencias le saca a Loeb. Al no tener información no regula, y corre más".

A pesar de este paso al bando contrario, Moya no se olvida de España y asegura: "Estamos siguiendo los tiempos de Xevi Pons. No sólo yo, sino que también David Lawporth, mi jefe. A ver si desde mi actual posición puedo ayudar a que salga adelante algún joven. También estoy en contacto con Subaru España, que cada día están más involucrados en la competición".

Tras los pasos de Todt. Hay ejemplos de copilotos que dejaron el asiento derecho y saltaron a la fama. David Richards, ex campeón del mundo junto a Ari Vatanen, es dueño del equipo Subaru, poseedor de los derechos televisivos del Mundial y director deportivo del equipo BAR de F-1. O Jean Todt, subcampeón con Guy Frequelin, ahora director deportivo de Ferrari tras haber ganado casi todo en rallys y el Dakar en Peugeot como jefe de equipo. ¿Llegará Luis a ese nivel?