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Primera | Atlético

El gigante de River

Puede ser lateral izquierdo, pero mejora mucho de central. Su casi metro noventa de altura le convierte en peligroso por su buen cabezazo, aunque con la pelota en los pies es limitado.

Actualizado a
<b>GARANTÍA EN LA ZAGA</B>. De momento, el central, que procede de River Plate, ha conseguido aportar seguridad a la zaga rojiblanca y no sería de extrañar que fuera titular en la Liga.

Si alguien tiene dudas de si Lequi prefiere jugar de central o de lateral, es el propio jugador quien repite con insistencia su condición de defensa central. Zurdo, en la banda izquierda ni rinde bien ni se encuentra a gusto, a pesar de haberlo intentado más de un técnico en River y en Rosario Central. Matías Lequi funciona bien como central tanto en defensa de cuatro hombres como en una línea de tres centrales, pero, por supuesto, siempre en la izquierda. Esas son las cualidades de un defensor fuerte, lento, muy bueno en el juego aéreo y bastante limitado con la pelota. Si no se complica y juega en corto y sencillo mejoran mucho sus posibilidades. Pero, ante todo, es defensor y difícilmente se le puede adaptar al centro del campo.

Nacido en Rosario el 13 de mayo de 1981, empezó en los infantiles del Central Córdoba y, hasta que desarrolló su estatura, más de un técnico le veía como un mediocentro, un cinco de zancada larga y juego lento. Pero sus cualidades técnicas le retrasaron hasta el puesto de central casi desde el principio. Todo en un Rosario Central que poco a poco se construyó con futbolistas como Ezequiel González, Maceratesi o Loeschbor, recién llegado a España y compañero de Lequi en el centro de la defensa. Los dos juntos jugaron la Copa Libertadores de 2001, aunque la aparición de Díaz dejó a Loeschbor más de un partido en el banquillo. El flaco Lequi se mantuvo inamovible con partidos inolvidables como un 6-0 a Universitario de Lima en un Gigante de Arroyito volcado. Los canallas de Rosario Central volvían entre los grandes de América con Lequi como uno de los hombres clave de la defensa. Siempre central por la izquierda en defensa de cuatro hombres, con algunos partidos como lateral. En la banda jugó ante Vélez en el triunfo con que metió a los canallas en octavos, pero como central ayudó a llegar hasta las semifinales. La derrota ante Cruz Azul marcó el principio del fin de Lequi en Rosario Central.

Ya en aquella época se convirtió en columna defensiva de la selección Sub-20 que disputó el suramericano. Había sido habitual con Pekerman pero al final se quedó fuera de la lista del Mundial. Una decepción para Lequi, porque perdió el tren de aquella selección de Coloccini, Saviola, Maxi Rodríguez o D'Alessandro que asombró al mundo. A pesar de ello, los dirigentes de Rosario Central conocían su nivel y no tardaron en traspasarle. Ya con sólo 20 partidos en Primera habían vendido el 50% de su pase y River se hizo con el resto. No gustó mucho a la hinchada canalla, por cierto. Lequi debutó en River Plate en un recordado triunfo en el Monumental ante Huracán como lateral izquierdo. Aquel día, River salió con Yepes y Ayala en el centro de la defensa, y Lombardi a la derecha en una línea defensiva que después cambiaría con la marcha de Yepes al Nantes. Lequi sufrió como lateral izquierdo, en una decisión de Ramón Díaz que a punto estuvo de costarle cara al jugador.

Consolidación. Fueron unos inicios terribles, abroncado por la grada y lejos de su mejor puesto. Tampoco cambió mucho el panorama tras la llegada del chileno Pellegrini. Obsesionado con Lequi como lateral con mucho recorrido, hasta que no jugó como central tras la marcha del colombiano Yepes no llegó su mejor momento. Pero al final se consolidó como central y así le descubrió el Atlético. Bueno en los balones aéreos por su casi metro noventa de estatura, es muy peligroso en ataque en jugadas de estrategia. Ante el América de Cali marcó su último gol importante con River. El partido terminaba y Lequi cazó un cabezazo al segundo palo que dio el triunfo a los millonarios. Sirvió de poco, porque River quedó eliminado y por eso le queda la espina de la Copa Libertadores. Ni en Rosario Central ni en River llegó a la final. Ahora, en el Atlético, buscará una clasificación para Europa. De momento, será titular y ha cumplido en pretemporada.

LO QUE APORTARÁ

Firmeza en la parte de atrás

Lequi no pierde nunca la posición, no suele cometer despistes y no deja la espalda descubierta. Son tres buenas cualidades para un central que, además, viene con experiencia de jugar a buen nivel en Argentina. Consciente de sus limitaciones, no suele intentar aventuras en el centro del campo.

Más poder en el juego aéreo

En este aspecto es muy bueno y es una evidente virtud suya. Buen cabeceador, no sólo por su estatura, sino por su buena colocación en ataque. Lo demostrará en nuestra Liga y subirá al área rival en las jugadas de estrategia. Buscará repetir goles como el que consiguió ante al América de Cali.