PARÍS 2024 | HOCKEY HIERBA (F)
España cae en las garras de las Leonas pese a su enorme lucha
Dos desafortunadas acciones de estrategia pusieron por delante a la fuerte Argentina, demasiada rémora, aun así las RedSticks ofrecieron un recital defensivo y un progresivo asedio sin recompensa.
Alrededor de 250 personas mueren al año por ataque de leones. Pero esas estadísticas no especifican lo que ocurre ante las Leonas, como se conoce popularmente a la potente selección argentina de hockey hierba, segunda del ránking internacional, plata en Tokio 2020, subcampeona del mundo y clarísima candidata a un nuevo podio. Las RedSticks, sin embargo, cataron en su propia piel lo que es caer en sus fauces, en el tercer partido de la fase de grupos de los Juegos de París 2024. Una derrota hasta cierto punto previsible, a pesar de que el equipo luchó con determinación y cohesión, pero que en definitiva obliga a ganar este jueves a Sudáfrica.
Acaso el descuido de España fue desobedecer a las leyes del rey de la selva, que pasan por mantenerse a una distancia considerable y no molestarle. Porque comenzaron las de Carlos García Cuenca concentradas, buscando combinar, trazar jugadas, pero enseguida se toparon con la velocidad de una Argentina que venía de ganar sus dos primeros encuentros (ocho goles a favor, solo tres en contra) y que a los cuatro minutos tuvo ya en un tiro cruzado de su atacante María Granatto una ocasión clarísima.
Respondió enseguida Alejandra Torres Quevedo con un atinado remate que salvó Cristina Cosentino, molestando al fin a las Leonas como desaconsejan los pactos de la sabana, de modo que en el contraataque forzaron estas un penalti córner, que a su vez desembocó en un penalti stroke porque la bola había tocado en el cuerpo de una defensa. Y ahí Agustina Gorzelany, la especialista, la defensa goleadora (llegaba ya con cuatro en dos partidos) no tuvo piedad. Solo iban seis minutos jugados y el encuentro ya se hacía bola ante un rival sumamente poderoso.
Tuvieron que remar las RedSticks, salvando en primera instancia otro penalti córner y consolidándose defensivamente. Hasta que, a los seis minutos del segundo cuarto, un desafortunado despiste lo acabó de torcer todo, al cometer un nuevo penalti córner las españolas por enviar una bola rechazada a los pies de una compañera. No falló ahí Eugenia Trinchinetti, en una ejecución que si estaba ensayada, la debió enseñar a las argentinas un maestro o maestra de billar, porque fue una brillante carambola.
La destreza que tuvieron las de Fernando Ferrara es la que le faltó a España, con un pelín de infortunio, ya que se echó al ataque irremisiblemente y enlazó tres penalti córner a favor, pero no logró sacar tajada. Y eso que el último de ellos acabó desembocando en un tiro al palo por parte de Coti Amundson Teves. Era la oportunidad de meterse de nuevo en el partido antes del descanso.
Como no pudo ser antes, fue después. En la reanudación, avisó primero Laura Barrios en un penalti córner, que como había sucedido previamente en contra tuvo como consecuencia un stroke, pero éste favorable. Y ahí sí que Lola Riera al fin convirtió el 2-1. Desafiaron las españolas cualquier código selvático, pues miraron a los ojos a las Leonas y pasaron a dominar. Tuvo el empate María López en otro penalti córner, que detuvo Cosentino. A lo que Julieta Jankunas y Agustina Albertarrio respondieron con sendos disparos, atajados por una siempre atentísima Clara Pérez.
Pero el poderío era español, como si el león se topara con un felino todavía mayor y más peligroso. Patricia Álvarez, Begoña García, Júlia Strappato, Blanca Pérez... Una tras otra fueron disparando y asediando a las argentinas, volcadas al ataque. A dos minutos para el final volvió Lola Riera a tener el empate en su stick, pero como casi siempre Cosentino se lo impidió. Y otra vez Torres Quevedo. No hubo manera.
Con cuatro puntos después de las tres primeras jornadas, conserva España intactas las opciones de clasificación para los cuartos de final, aunque no puede dormirse en los laureles. Una inmensa parte de sus posibilidades pasan por la victoria en su próximo compromiso, que disputará este jueves a las 17:30 ante Sudáfrica, el rival a priori más flojo del grupo. Aun así, dispondría la Selección de una última bala en la recámara, el sábado (12:45) contra una Australia muchísimo más afilada que las africanas.
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