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PARÍS 2024 | VELA

Botín y Trittel: “Se ha hecho eterno... pero estamos en el cielo ahora mismo”

La pareja española se mostró exultante tras ganar el oro olímpico. “Llevamos muchísimos años preparándonos para este momento”, comentaron.

Botín y Trittel: “Se ha hecho eterno... pero estamos en el cielo ahora mismo”
RFEV

Emoción, lágrimas y todos al agua. Así celebraron el oro olímpico Diego Botín y Florian Trittel. Ninguno pudo, ni quiso, contener la alegría y es que son eternos gracias al oro olímpico en 49er: “Ha sido un sueño. La verdad es que el oro lo hemos visualizado muchas veces. Nos ha costado darnos cuenta de lo que realmente habíamos conseguido cuando pasamos la línea de meta, pero es que se mezclaron muchas emociones. Muy agradecidos por haber conseguido esto con el apoyo de nuestros familiares, amigos y equipo. Momento muy especial para nosotros y para toda españa. Esto va para toda España”, comentó Trittel a AS.

Los abrazos se multiplicaron, como las muestras de cariño hacia un Diego Botín y Florian Trittel que recorrieron toda la playa de Marsella, bandera de España a cuestas, para festejar con sus familiares. Multitud de imágenes para el recuerdo y es que son los nuevos campeones olímpicos de 49er. “Uno tiene sueños y pensamientos en grande y este oro olímpico lo es. Era también un reto personal y queríamos dar nuestra mejor versión. El resultado ha sido excelente tras una semana en la que hemos sido los mejores”, añadió un Trittel que dejó claro desde el principio que querían ganar la Medal Race. Y dicho y hecho. No ganaron ninguna de las 12 mangas de la serie de clasificación, pero sí la definitiva, la que les catapultó hacia el infinito. Demostraron entereza y calidad. “Para nosotros no había otro resultado, habíamos visualizado muchas veces esta situación y no cabía otro resultado. Han sido días largos, y ayer no poder hacer la Medal se hizo eterno, pero ha salido todo perfecto y estamos en el cielo ahora mismo”.

Es un oro de esos que sanan el alma y Diego Botín se ha arrancado la espina de Tokio 2020, cuando fue cuarto, con Iago López-Marra. Perdió el bronce tras sumar los mismos puntos que los terceros. Sin duda, es un oro tremendamente celebrado y es que es el primero que logra España en estos Juegos Olímpicos de París 2024. “Es un honor haber conseguido el primer oro para España, es una sensación indescriptible. Ha sido una semana muy dura, no se han dado nuestras condiciones meteorológicas, y aun así lo hemos conseguido. Llevamos muchísimos años preparándonos para este momento. Hemos fallado muchísimas veces pero sin esos fallos y las experiencias acumuladas habría sido imposible conseguir lo que hemos conseguido. Hoy hemos unido toda esa experiencia, todo todo ese trabajo, y hemos conseguido el oro, lo máximo que se puede conseguir. Haberlo hecho con todo nuestro equipo y nuestras familias aquí es hacerlo en el mejor escenario”. El cántabro no paró de sonreír: “No nos creemos lo que acaba de pasar, cómo acaba de pasar y en el escenario en el que lo hemos hecho. Difícil de describir con palabras lo que sentimos. Sufrimos cada metro. Ayer hicimos dos intentos de Medal Race y esta noche nos ha vuelto a costar dormir, pero ha salido todo genial. Ejecutamos el plan a la perfección en el agua y hacerlo delante de nuestra familia ha sido increíble. Hemos leído muy bien el campo de regatas y la salida. No es fácil hacer bien las cosas bajo tanta presión”.

Superadas las 17:30 se llevó a cabo la ceremonia de medallas en la playa de Marsella y fue emocionante. Especialmente, como no, para Diego Botín y Florian Trittel que subieron a lo más alto del podio. Una cuenta atrás marcó su salida a escena, aunque antes hubo, además de algunos ligeros nervios, momentos repletos de espontaneidad y graciosos. Como cuando Florian Trittel bromeó con que le quedaba pequeño el chándal. Pero lo que demostró su gran complicidad es cuando Trittel se dirigió a Botín y le dijo “disfruta, hermano”. Ya en el podio, selfie con el resto de medallistas (Nueva Zelanda y Estados Unidos), medalla de oro al cuello e himno de España sonando por los altavoces.

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