Autocrítica y optimismo de de cara a cuartos: “Vamos a estar a la altura”
Tanto los jugadores como el seleccionador son conscientes de que ya no hay margen de error, pero confían en estar en la lucha por las medallas.
La mejor manera de seguir creciendo es sabiendo reconocer los errores y aprender de ellos. Tanto los jugadores de la Selección como Santi Denia y su cuerpo técnico son conscientes de que España no jugó un buen partido ante Egipto (1-2), lo que le costó el primer puesto del Grupo C en la tercera jornada de la fase de grupos, pero en ningún momento han buscado excusas. “Hemos tenido errores colectivos y ellos han merecido la victoria, no hay más”, aseguró al finalizar el encuentro Sergio Gómez, uno de los capitanes de la Selección. Denia, por su parte, aseguró que tiene que “mejorar el primero” y que estaba orgulloso por la reacción del equipo, que intentó ir a por el empate hasta el final. Hecha la autocrítica, el mensaje en el vestuario de cara a los cuartos de final es contundente. Y optimista. “No hay margen de error. Vamos a estar a la altura”, era la proclama de los futbolistas al acabar el encuentro.
Y es que a pesar de la derrota, el grupo es consciente de que el partido ante Egipto no se tomó como una final. Para empezar, porque Denia rotó prácticamente a todo el equipo, incluyendo en el once a tres de los reservas (Camello, Mosquera e Iturbe), que fueron de lo más destacado de España, pero que saben que ante Japón volverán a la grada, salvo que otro futbolista tenga molestias. Los que regresarán al once serán Baena, Abel Ruiz y Cubarsí, la columna vertebral titular de esta Selección. Arnau Tenas, Miranda, Sergio Gómez, Barrios, Fermín y Eric Garcia, que también serán titulares en cuartos, comenzaron en el banquillo ante Egipto. Y es que en un calendario con tres días entre partido y partido, para Denia era una prioridad absoluta que su equipo de gala llegase descansado a la ronda eliminatoria, aunque eso costase el primer puesto del grupo.
Además, varios jugadores reconocieron en la previa al encuentro que existía cierta relajación en el equipo después de haber logrado la clasificación a los cuartos en el segundo partido ante República Dominicana. Esa relajación ya no tiene cabida en la fase eliminatoria, menos aún después de la derrota en Burdeos. “Vamos a recuperar, a meternos al hielo y a trabajar y pensar desde ya en el partido de cuartos”, concluía Sergio Gómez, uno de los que tomó la voz cantante en el vestuario al finalizar el encuentro. “No nos falta nada, lo que hay que hacer es levantarse de cara al siguiente partido”, insistió por su parte Pacheco, que también fue autocrítico con su fallo en el 0-2.
Mejora en la circulación
Desde el primer día ante Uzbekistán, Santi Denia ha repetido que lo que menos le estaba gustando de la Selección era la falta de velocidad en la circulación. Ante República Dominicana, España mejoró en ese aspecto, pero solo sometió al completo a su rival a partir de la expulsión de Azcona al final de la primera parte. En el tercer partido ante Egipto, la que debería ser una de la señas de identidad de España volvió a echarse en falta. “Tengo que mejorar en la transmisión del mensaje”, ha sido el mantra de Santi Denia desde que comenzó la andadura de España en estos Juegos Olímpicos. “Hemos estado lentos en la circulación”, reconocen varios futbolistas conscientes de que no están consiguiendo imponer el sello característico de la Selección en estos JJ OO.
La fragilidad defensiva es el otro gran punto a mejorar. España ha encajado cuatro goles en sus tres primeros partidos recibiendo al menos un tanto en cada uno de ellos. “No podemos conceder tanto” era otra de las frases que más se dijeron ayer en la charla que tuvieron jugadores y cuerpo técnico. Por suerte, para la Selección, el pinchazo ante Egipto apenas ha trastocado los planes de España, que después de hacer autocrítica, se sabe con la calidad suficiente para luchar por las medallas.