Una estatua de una niña junto a San Mamés con motivo de la final de la Champions femenina
“Los ojos del mundo del deporte estarán puestos en nosotras el 25 de mayo”, sostienen. La Catedral quiere batir el récord de asistencia a una cita de este tipo.
La colocación de una estatua de una niña mirando a San Mamés, con la ilusión de jugar algún día en ese estadio, ha abierto los actos con motivo de la final de la Liga de Campeones femenina que se disputará el próximo 25 de mayo en el campo bilbaíno. La estatua está situada cerca de la que recuerda al legendario José Ángel Iribar y su colocación está enmarcada dentro la iniciativa ‘Hay mucho en juego’, una “campaña de sensibilización y concienciación” impulsada por instituciones, la Diputación Foral de Bizkaia y el Ayuntamiento de Bilbao, y federaciones vasca, alavesa, guipuzcoana y vizcaína.
Según explican los promotores de la iniciativa, la obra, una escultura de bronce a tamaño real, refleja a una niña llamada Nahia -la que ha servido de modelo en realidad se llama Carla- que “mira ilusionada y orgullosa al estadio, pisando un balón y soñando con jugar finales en estadios emblemáticos arropada por su público y ser campeona de Europa, como ya lo han sido otras niñas”. Un precioso homenaje a las futbolistas.
Una de esas niñas fue en su día también la internacional española y campeona del mundo Irene Paredes, exjugadora del Athletic y ahora en el Barcelona, quien a través de un vídeo recordó que ella fue “también una niña que soñaba con jugar finales en lugares como San Mamés”. ”Afortunadamente, todo eso está cambiando y me siento orgullosa de pertenecer a esta generación que está cambiando las reglas de juego, pero todavía más de todas las anteriores que lucharon para que hoy podamos estar así”, se felicitó la central guipuzcoana.
También a través de un vídeo, Nadine Kessler, máxima responsable de fútbol femenino de la UEFA, destacó que “España es actualmente uno de los epicentros mundiales del fútbol femenino". "Y, por eso, no se me ocurre una mejor manera de celebrar el fútbol femenino enfrentando a los dos mejores clubes de Europa en Bilbao, en un estadio tan grandioso como La Catedral", apuntó.
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“Los ojos del mundo del deporte estarán puestos en nosotras el 25 de mayo. Esperamos crear más historia en el fútbol femenino”, dijo Kessler de cara a una cita para la que este viernes, 8 de marzo, se pondrán a la venta las entradas. Los precios serán de 15, 20 y 25 euros y también podrán adquirirse localidades de categoría ‘premium’ a 45 euros. En el acto han estado presentes la joven árbitra Arantza Gallastegui; la directora deportiva de la estructura femenina del Deportivo Alavés, Dafne Triviño; la exfutbolista de la Real Sociedad, Aintzane Encinas; y la primera entrenadora de fútbol de Euskadi, Ana Astobieta.
Con esta iniciativa se pretende que la estatua, que está acompañada por una placa conmemorativa de la final de este año, se convierta “en un icono referente a la vanguardia del compromiso con la igualdad de oportunidades en el deporte”, en “icono de la Final de la UEFA Women’s Champions League 2024″ y en “una seña de identidad de la igualdad y de valores como el respeto, la inclusión y la diversidad en el fútbol femenino”. El sueño es batir el récord de asistencia a una cita de este calibre. El objetivo de La Catedral es superar los 50.212 asistentes de Múnich 2012.
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