Tiflis esconde un billete
España puede clasificarse para el Mundial si gana a Georgia y Turquía no lo hace ante Bulgaria. Laporte, posible socio de Huijsen en el eje de la zaga.
Para cualquier persona es imposible estar en dos lugares al mismo tiempo. Ni siquiera los tertulianos pueden hacerlo. Pero esta tarde, la Selección española jugará a la vez en dos ciudades separadas por 1.600 kilómetros. Será en Tiflis y en Bursa donde puede asegurarse el pasaporte para el Mundial que se disputa el próximo verano en México, Canadá y Estados Unidos. Las matemáticas son claras: se clasificará directamente si gana a Georgia y Turquía no vence a Bulgaria, o si empata y los otomanos pierden (sigue en directo el partido de hoy de España en As.com).
Antes de esos dos partidos, que se juegan en horario unificado (18:00), España lidera el grupo E con 12 puntos tras resolver con victoria sus cuatro encuentros. Turquía, mientras, suma nueve pues arrastra la dolorosa derrota sufrida ante los pupilos de Luis de la Fuente, a quienes visitarán el próximo martes en Sevilla.
Los números dejan claro que La Roja acaricia un nuevo Mundial, algo que se ha convertido en rutina. Desde 1974 no falta al gran campeonato y ese es el mejor chequeo a la buena salud de la que disfruta el fútbol español. Algunos de sus talentos, eso sí, no podrán estar esta tarde sobre el césped del Boris Paichadze de Tiflis. De nuevo las lesiones se cruzan en el camino del seleccionador, que hace malabares en cada concentración para no decir lo que verdaderamente siente. Lamine Yamal, quien en ese mismo estadio rompió el récord de precocidad al debutar con la absoluta a los 16 años y 57 días, ha sido el último en tener que coger el trolley (sin ni siquiera haberlo abierto) y volverse a casa. Una pubalgia, que es trending topic en el fútbol actual, ha pasado factura al jugador azulgrana como también lo ha hecho con su colega de banda, en este caso la izquierda, Nico Williams.
De la Fuente y la plaga de lesiones
Sin ellos, De la Fuente tendrá que reinventarse como viene haciéndolo en toda la fase de clasificación. Lo hace y ve la botella medio llena, no queda otra. “Esperemos que estos futbolistas que ahora están lesionados estén recuperados para entonces (el Mundial), hay mucho tiempo todavía para que se recuperen y pueda contar con ellos en buen estado”, decía en la rueda de prensa de ayer en Tiflis. Y como hombre de fe, añadió: “Intentaremos en cualquier caso disponer de los futbolistas que podamos y rezar para que no haya más lesiones”. Amén.
Y es que Lamine y Nico no son las únicas bajas por lesión en el once tipo que presumiblemente alinee España en el Mundial. En Tiflis tampoco estarán Carvajal, Rodrigo o Pedri, mientras que Morata se quedó fuera de la convocatoria por razones técnicas, aunque el seleccionador haya dicho en más de una ocasión que cuenta con él para el torneo del próximo verano.
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"Rezaremos por las lesiones, pero habrá algún disgusto"
Por lo pronto, hay que ganar a Georgia con lo que hay, que es mucho y bueno; De la Fuente debe resolver quién acompaña a Huijsen en el eje de la zaga (probablemente Laporte), quiénes ocupan las bandas y quién hace de nueve, aunque de un tiempo a esta parte a Oyarzabal se le ha puesto una cara mitad Haaland, mitad Mbappé. ¿Y enfrente? Pues Sagnol confía en que su equipo juegue “sin miedo”, aunque aclara que con el partido ante España “empieza la clasificación de Georgia para la Eurocopa 2028”. Eso sí que es jugar en dos sitios a la vez.
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