Pol Fortuny: el ‘factor X’ de la Rojita se hornea en La Fábrica
El mediapunta decidió la semifinal ante Italia con su gol. Ha dejado atrás un calvario de 329 días tras romperse el cruzado. A su vuelta, Real Madrid C.
Máximo asistente del Europeo Sub-19 y héroe de España en la semifinal. Todo ello en 157 minutos. Cada 39′, Pol Fortuny (19 años) sale en la foto del gol. Su tanto a Italia (100′), con definición precisa con su zurda, el súmmum. El premio a un camino espinoso. Una rotura de cruzado le apartó del verde durante 10 meses. Un calvario de 329 días que, lejos de encerrarle en la oscuridad de la lesión cuando volaba con el Juvenil A del Madrid, “le ha hecho más fuerte”. Lo explica a AS su gente, que pone en valor su entereza: “Nunca hubo un lloro”. Mucho trabajo en la sombra que no tardó en dar frutos. Ni Arbeloa ni la RFEF dudaron cuando hubo alta médica. Desde su regreso en febrero, continuidad. Y colmillo. Cuatro goles y ocho asistencias entre club y selección. Uno cada 61,5′. El factor X de la Rojita se hornea en La Fábrica.
Porque la confianza que le profesa el club blanco no rebló con la lesión. En diciembre, unos meses antes de volver a vestirse de corto, le renovaron para blindarle. En Valdebebas le espera Álvaro Gómez-Rey, en el Real Madrid C, aunque con visos de terminar en el Castilla más pronto que tarde. Un plan consensuado, en el que se entiende que, a pesar de las buenas sensaciones mostradas desde su recuperación, lo idóneo es dar el salto al segundo filial blanco. Foguearse para adquirir mayor rodaje en Segunda RFEF hasta encontrar el potencial ‘ascenso’ de manera natural. Veremos tras este Europeo si el plan no cambia...
¿Qué tipo futbolista es Pol Fortuny?
Hablar de Pol es hacerlo de un extremo derecho a pierna cambiada, con gran capacidad para generar peligro en espacios cortos. A menudo comparado con (para contextualizar) David Silva por su zurda y físico similar, es escurridizo y muy vertical, con una cifras goleadoras y de asistencias de impresión. El revés llegó cuando era uno de los líderes de la generación dorada de Arbeloa, la ‘Quinta de Nico Paz’ que ganó el triplete (Liga, Copa y Copa de Campeones) hace dos temporadas. Sus números hasta el fatídico crac (extraídos de @FabricaMadrid), 34 partidos, 12 goles y 17 asistencias, participando en un tanto cada 76 minutos. La portería, siempre, entre ceja y ceja.
Fisioterapeuta y entrenador en potencia
Nacido en Tarragona y ‘pescado’ de la cantera del Espanyol en 2019, no tardó en conquistar Valdebebas. Al preguntar por los pasillos de La Fábrica por Pol, las palabras que se repiten son “profesional”, “trabajador”, “perfeccionista”. Una coctelera de un chico centrado en el fútbol y alejado de cualquier ruido externo. No es casualidad que tenga a Luka Modric como su modelo a seguir. Lógicamente, por sus logros, pero también por todo lo demás. Por la manera de afrontar la profesión que tiene el croata. Ni perderá de vista los movimientos de Luka cuando suba con el primer equipo, ni lo hace cuando sus entrenadores le dan directrices. Apasionado de la táctica, a sus 19 años ya tiene el nivel 1 de entrenador.
Una madurez que también se plasma en la universidad, donde saca notazas en Fisioterapia después de haber hecho lo propio en la EBAU. En su cabeza sólo piensa en triunfar sobre el verde, pero entiende que es fundamental la formación para abrir puertas futuras. Pero su presente es el fútbol y en el horizonte ahora aparece una selección francesa ante la que firmó la decisiva asistencia a Simo en fase grupal. Llega con el rifle cargado.
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