“McGinn es su líder, es el Iniesta de Escocia”

A los hermanos Rams siempre les gustó la investigación, entender el por qué de las cosas y bucear en vez de quedarse en la superficie. Con el tiempo canalizaron su permanente curiosidad a través del deporte. Jordi (30 años) y Marta (31) se entretenían desde jóvenes analizando y desmenuzando tácticamente partidos en su casa de Barcelona y debatiendo sobre ellos. Ella se decantó por el baloncesto y él por el fútbol. Estudiaban métodos y sistemas, creaban su base de datos y evolucionaban. Años después, el pasatiempo derivó en oficio. Tras una etapa de formación por separado fusionaron conocimientos y convergieron en el Midtjylland danés, que resultó su primera experiencia en un club profesional. Ahora forman un equipo indivisible y dirigen el departamento de análisis del Aberdeen escocés. Son los únicos españoles en la Scottish Premier League.

- ¿Cuál es su historia?

- Jordi: Desde pequeños, por nuestro entorno familiar, siempre hemos estado ligados al deporte. Con 6 años yo ya jugaba al fútbol y Marta al baloncesto.

- Marta: Siempre nos ha apasionado el deporte, primero para jugarlo y luego para analizarlo.

- ¿Cómo se da el paso de ser protagonista a ser observador?

- J: La investigación nos cautivó desde muy jóvenes. Conocimos a empleados de la empresa de análisis que contrató Guardiola cuando estaba en el Barça B y empezaron a introducirnos en este mundo.

- M: Adquirimos una licencia del software que ellos tenían y a partir dE ahí fuimos muy autodidactas. Le echamos mucho tiempo y aunque teníamos herramientas de trabajo bastante rudimentarias siempre fuimos avanzando.

- ¿En qué momento salen del cascarón para entrar en el mundo real?

- J: A través del Barça me surgió la oportunidad de ir a las academias del club en USA para desarrollar mi labor como analista. Estuve allí cuatro años.

- M: Entretanto yo seguía haciendo ese mismo trabajo pero con el equipo femenino de baloncesto del Barcelona.

- Y luego les llegó su primera oportunidad en el fútbol profesional…

- J: Me hicieron una propuesta del Midtjylland, de primera división de Dinamarca, propuse que viniese mi hermana para ayudarme y ellos aceptaron.

- M: Ahí hice el trasvase del baloncesto al fútbol aunque yo ya estaba familiarizada porque también había analizado muchos partidos y compartía mucha información con Jordi. El intercambio de conocimientos y el debate era constante.

- Y de Dinamarca a Escocia…

- J: Era un proyecto interesante. El Aberdeen nos planteaba encargarnos del primer equipo, del femenino y de la cantera. Había mucho campo para trabajar y nos lanzamos a ello.

- ¿No hay más españoles en la Scottish Premier League?

- M: Jugadores y entrenadores no hay. Somos los únicos.

- ¿La liga escocesa sigue siendo cosa de dos?

- J: Por desgracia sí. Celtic y Rangers se alternan para ganar siempre. El último título de liga de otro club fue precisamente el Aberdeen hace 40 años, en 1982.

- ¿Hay alguna forma de acabar con ese duopolio?

- J: A los británicos, en general, les encanta la tradición y les cuesta el progreso. El Aberdeen, por ejemplo, fue el primer club en Europa en poner banquillos para los suplentes a principios del siglo pasado y aún son muy parecidos a los que instalaron hace más de cien años. Digo esto porque la Federación, el reparto de derechos televisivos y hasta los aficionados siguen esa línea, todo va enfocado a esa eterna pelea entre los dos. Su presupuesto es mayor que el resto, la diferencia económica es abismal y mientras eso no cambie a nivel estructural y los que mandan tengan intención real de igualarlo, empezando por los ingresos de televisión, será muy complicado acabar con ello.

- ¿Y su selección qué aspiraciones tiene?

- M: Hay una nueva generación muy buena y Steve Clarke es un técnico metódico que les está haciendo crecer. Se están preparando para llegar más lejos de lo que han hecho hasta ahora. Hay buena materia prima y un buen conductor.

- ¿Quién es su líder en el campo?

- J: Tienen jugadores magníficos como Robertson, Tierney, McGregor o McTominay, que metió dos goles ante Chipre, pero el referente para todos, el Andrés Iniesta de Escocia, es John McGinn, capitán del Aston Villa.

- M: Hay otro jugador menos conocido que a mí me encanta. Es Lewis Ferguson, mediocentro del Bolonia, que sale del Aberdeen. Tiene una proyección enorme.

- ¿Pueden dar la sorpresa ante España?

- J: Seguro. Será una batalla. Ellos son duros y Hampden Park aprieta muchísimo. España va a sufrir. No va a ser un paseo ni mucho menos y quien piense eso se estará equivocando.

- ¿En Escocia es mejor el fútbol o el whisky?

- J: (Risas). Pon una X. Y hay que añadir la cerveza. Les gusta mucho beber y los fines de semana lo mezclan con el fútbol y digamos que se ponen muy contentos.

- Ustedes aún son muy jóvenes ¿qué objetivo se marcan para el futuro?

M: Primero consolidarnos, vivir de esto dentro de una organización muy profesional que nos permita crecer pero puestos a soñar nos gustaría en unos años volver al Barcelona. Tendremos que trabajar duro para que esa puerta pueda abrirse algún día.