Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

ESPAÑA I QATAR 2022

Luis Enrique, a salir de la linde de Brasil 2014 y Rusia 2018

Desde Sudáfrica 2010, España ha jugado diez partidos de Copa del Mundo y sólo ha ganado tres: frente Australia, Irán y Costa Rica, tres selecciones por debajo de las 25 primeras de la FIFA.

Luis Enrique durante el partido entre España y Japón
JuanJo MartínEFE

España ha disputado diez partidos de Copa del Mundo desde que levantó la Copa Jules Rimet en Sudáfrica 2010 y el balance desde esa fecha es demoledor. En los últimos doce años, en choques de la intensidad y la exigencia de un Mundial, La Roja sólo ha conseguido la victoria contra tres países que no están entre los 25 primeros del ránking de la FIFA: Australia (38), Irán (26) y Costa Rica (31). Los otros siete rivales en las últimas dos Copas del Mundo y lo que va de Qatar 2022, sacaron puntos ante la Selección.

Vicente del Bosque llevó a España al título Mundial en Sudáfrica al conseguir seis victorias consecutivas (todas, menos una, por un sólo gol de diferencia) y superar la derrota en el partido del debut, frente a Suiza. Luego fueron cayendo ante La Roja las selecciones de Honduras (2-0), Chile (2-1), Portugal (1-0), Paraguay (1-0), Alemania (1-0) y Holanda (1-0). España cimentó su éxito en una gran defensa y en un ‘once’ que se podía recitar de memoria. Desde entonces hasta hoy, apenas se han repetido una sola alineación.

Los siete rivales con los que no pudo España desde Sudáfrica han sido Holanda (1-5), Chile (0-2), ambas derrotas en Brasil 2014 bajo la dirección de Del Bosque; Marruecos (2-2), Portugal (3-3) y Rusia (1-1) con Hierro como seleccionador interino tras la destitución de Julen Lopetegui y los dos últimos partidos, ya con Luis Enrique, en Qatar 2022, frente Alemania (1-1) y contra Japón (0-2).

Esta trayectoria demuestra a las claras lo complicado que es avanzar en la Copa del Mundo, tal y como demostró Japón anoche en Doha. España, salvo el oasis en Sudáfrica, siempre ha tenido serias dificultades para pasar rondas en las fases eliminatorias y ahora debe reponerse de la derrota contra los nipones para afrontar el próximo martes el envite contra Marruecos, con el que no pudimos hace cuatro años en Rusia.