Lamine y Yusi, cara y cruz de la rivalidad España-Marruecos
Las federaciones de ambos países van juntas de la mano en la candidatura del Mundial 2030, pero mantienen una lucha por la captación de talento.
Las relaciones entre las federaciones de España y Marruecos se han estrechado en el último año y medio gracias al acuerdo entre ambas para presentarse conjuntamente a la candidatura del Mundial 2030. Sin embargo, esa amistad esconde una rivalidad entre las direcciones deportivas de las dos organizaciones, que están en una pelea constante por la captación de jóvenes talentos con doble nacionalidad. En el último año, tres futbolistas fueron protagonistas de esta pequeña guerra entre federaciones: El Jabari, Yusi y Lamine Yamal.
El primero de ellos, original de Madrid, es un centrocampista del Atlético que después de debutar con la Sub-18 en 2022, decidió en febrero que su futuro internacional estaría vinculado con Marruecos, país al que ha representado ya en dos partidos con la Sub-20. Un caso similar es el de Yusi, uno de los laterales con más proyección de la canteral del Real Madrid. También nació en Madrid y disputó con España el Europeo Sub-17 de Israel en 2022, pero este verano también decidió que quería jugar en el futuro con Marruecos, que le ha convocado para ir con la Sub-20 en este parón. Ambos futbolistas han seguido los pasos de Achraf, Ez Abde y Munir, que en su día entraron en los planes de las selecciones inferiores de España y que hoy son futbolistas absolutos con Marruecos.
Quién sí ha decidido jugar con España es Lamine Yamal, al que Marruecos ha estado tentado durante los últimos meses para que acudiera a su selección absoluta, actual semifinalista del Mundial. Esas llamadas hicieron que De la Fuente se apresurara para convocarle con España a pesar de tener solo 16 años. Su caso, excepcional, no podía dejarse escapar.