El cara o cruz de los penaltis: 4-2 a favor de España

España ensayó este viernes los penaltis en la concentración de Donaueschingen. Luis de la Fuente le dio normalidad, pero admitió que, como profesionales, deben practicarlos. “Un aspecto más del juego”, señaló en la rueda de prensa previa al partido de cuartos contra los alemanes en Stuttgart (18:00 horas, La1). A la memoria de muchos vino la frase de Luis Enrique antes de los octavos de final del Mundial de Qatar contra Marruecos, cuando dijo que había animado a sus jugadores a que llegasen con mil penaltis tirados al Mundial. En un guiño maldito del destino, España fue eliminada desde los once metros.

El último precedente es positivo. El año pasado, en Rotterdam, la Selección levantó la Nations League después de una tanda dramática que terminó resolviendo Dani Carvajal en el sexto lanzamiento después de que Joselu, Merino, Rodrigo y Asensio marcasen; y Laporte lo mandase al larguero.

En la historia de las Eurocopas, el balance también es favorable a España, que ha jugado seis tandas de penaltis y ha ganado cuatro. La primera que disputó fue en las semifinales de la edición de 1984 contra Dinamarca. Preben Eljkaer Larsen, una de las grandes figuras de la Dinamita Roja, falló su último lanzamiento. Manu Sarabia, como antes Santillana, Señor, Urkiaga y Víctor, convirtió el quinto y transportó a España a la final de París.

En 1996, salió cruz. En los cuartos de final de Wembley, contra la anfitriona como este viernes, la Selección se estrelló contra el palo y Seaman. Hierro y Nadal fallaron sus penaltis. Shearer, Platt, Pearce y Gascoigne no perdonaron y España se fue para casa en cuartos. En 2008, la historia cambió en el Prater. Luis Aragonés llenó de confianza a sus jugadores, que llegaron a la tanda convencidos de que al fin romperían el muro de los cuartos. Casillas paró los penaltis de Di Natale y De Rossi. Así, y pese al fallo de Güiza, los penaltis convertidos por Villa, Cazorla, Senna y Cesc llevaron a la Selección a las semifinales.

Aunque menos recordado que el partido contra Italia, la semifinal de la Eurocopa de 2012 también tuvo tintes dramáticos. Portugal y España empataron a cero en los 120 minutos de Donetsk, con una prórroga al límite. La tanda empezó mal para la Selección. Falló Xabi Alonso, pero el error de Moutinho, con Casillas otra vez como ángel de la guarda, lo compensó rápido. España ya no perdonaría. Iniesta, Ramos, Piqué y, otra vez Cesc en el quinto, dieron el pase a la final. Bruno Alves, después de los aciertos de Pepe y Nani, mandó el cuarto penalti portugués a las nubes. Cristiano, reservado para el quinto, no pudo lanzar. España ya estaba en la final de Kiev.

En la última Eurocopa itinerante, celebrada en 2021 por la pandemia de 2020, España tuvo que jugar hasta dos tandas de penaltis. La primera salió cara. En el Gazprom Arena de San Petersburgo, contra Suiza, y después del 1-1 final, la muerte súbita empezó mal. Falló Busquets y marcó Gavranovic. Olmo convirtió y Suiza empezó a derretirse. Unai Simón detuvo los penaltis de Schär y Akanji; y Vargas lo tiró fuera. Después de que fallase Rodri, Gerard Moreno y Oyarzabal mandaron a España a semifinales. En Wembley, otra vez Wembley, España fue eliminada. Y eso que la tanda empezó bien. Simón detuvo el lanzamiento de Locatelli. Sin embargo, a renglón seguido, Olmo falló. Belloti, Bonucci y Bernardeschi marcaron; y, por el camino, Morata falló el cuarto lanzamiento de España después de los aciertos de Thiago y Gerard Moreno. Jorginho, con mucha calma, puso a Italia en la final y a España, en casa.

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