Ciudadano Ferran
El delantero de Foios, único valenciano de la Selección junto a Grimaldo, se ha volcado estos meses con los afectados de la DANA. Hoy juega uno de los partidos más especiales de su carrera.


Recuperado del golpe que sufrió en el partido contra el Atlético de Madrid, Ferran Torres jugará esta noche uno de los partidos más especiales de su carrera. Lo hará en Mestalla, el estadio que le vio hacerse futbolista de élite en el Valencia. Y lo hará para intentar meter a España en la Final Four de la Nations League pero, sobre todo, para homenajear a los más afectados por los terrible daños ocasionados por la DANA por Valencia.
Ferran, junto a Grimaldo el único valenciano de la Selección, nacido en Foios, zona norte que se salvó de la DANA, quedó afectadísimo por los acontecimientos del 29 de octubre. Lesionado como estaba entonces, no acudió a Montjuïc para ver un derbi contra el Espanyol que nunca se debió haber jugado. “¡Necesitamos un cambio en este país! No tengo fuerzas hoy ni de ir al estadio a ver a mis compañeros jugar. Frustración e indignación con nuestros gobernantes, sean unos u otros. Necesitamos que todo el país de un paso adelante. Sentimos el calor y apoyo de todos los compatriotas. El Estado está fallido. El pueblo salva al pueblo. Visca Valencia y Viva España”, llegó a escribir entonces en las redes sociales.
Ferran se ha volcado durante estos meses con los afectados de la DANA. Financió la reconstrucción de instalaciones de protectoras de animales afectadas por las riadas. También ayudó a una asociación de personas con discapacidad en Paiporta, promovió un torneo benéfico en El Planter con niños de las escuelas más damnificadas por la catástrofe. Y hasta se le pudo ver a pie de obra, echando una mano como un valenciano más, muy consciente de lo que estaba sufriendo su pueblo. Ferran llegó a activar un partido a final de temporada en Mestalla con el fin de recaudar fondos, pero la posibilidad de que el Barça llegase lejos en la Champions le obligó a desistir. “No olvidemos Valencia”, enseñó bajo su camiseta del Barça el día que visitó Mestalla y le marcó un hat-trick al equipo de su tierra. No celebró los goles, sólo mostró ese mensaje en el que, para él, está la base de todo. La constancia será básica en los próximos tiempos para que las zonas más delicadas se puedan ir reconstruyendo.
Ferran espera redondear la noche dándole una alegría a sus paisanos. Primero, que la Selección gane. Y segundo, nada le haría más ilusión que poder dedicarle un gol a tanta gente. Viene de hacerle dos al Atlético con el Barça. Está viendo la portería grande, se siente fino y a motivación no le va a ganar nadie esta noche en Mestalla. Un cocktail perfecto.
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