Aprobados y suspensos de España en Copenhague: la Selección es un cohete

Dimamarca tuvo un arranque de potro inglés, pero se paró como un burro manchego... hasta el tramo final. Diez minutos (más el arreón final de otros diez) le duró la alegría, exactamente lo que tardó Ayoze en rematar a la misma cruceta. Eso les metió el miedo en el cuerpo y antes de que quisieran espantarlo ya les había marcado un golito Oyarzabal, que ya es el máximo goleador de España en 2024 con seis tantos, uno más que Fabián. Un partido plácido hasta que Fabián se empanó en un pase atrás que dejó vendido a Raya. Los últimos minutos se complicaron, pero se salvó el resultado y un borrón no empaña un gran partido. Sin Lamine, Nico, Rodri ni Carvajal, España es un cohete. La Selección se clasifica para los cuartos de final de la Nations League como primera de grupo y jugará el partido de vuelta de la eliminatoria de marzo en casa.

Raya: está aprovechando su momento. Da mucha seguridad a la Selección y mezcla bien con el grupo porque tiene un magnífico juego de pies. Además, es valiente. Toma riesgos en las salidas y también en el inicio de las jugadas. Unai Simón tendrá un duro competidor cuando vuelva de su lesión, porque Raya se ha consolidado y no se lo va a poner fácil.

Porro: en Inglaterra ha mejorado mucho su juego ofensivo, y en la parcela defensiva se defiende gracias a su gran velocidad para recuperar la posición. Cuando llegó a la Selección nada fue fácil porque vino de nalgas, pero ha superado ese mal momento y ahora es un buen relevo para Carvajal.

Vivian: algo tienen los centrales del Athletic que no se ve en los demás. Esa sobriedad de Vivian, esa capacidad para no perder jamás la concentración, les da un plus ante jugadores del poderío de Hojlund, al que dejó en muy poco con la ayuda inestimable de su socio, Laporte. Los centrales de Lezama son como un coche alemán, pero con el catalizador bien puesto.

Laporte: en la Eurocopa se puso en modo mariscal y no ha perdido el tono, casi se diría que al revés, que ha ido a más. Se conoce que en Arabia va sobrado, porque cuando viene a Europa exhibe su mejor versión. Además, jugadores como él, que no hacen prisioneros, siempre son buenos para el equipo. Muy bien en la salida de balón, especialmente por el perfil zurdo.

Cucurella: donde hay pelo hay alegría, y Cucurella es el mejor ejemplo. Esa melena al viento es un alivio para el equipo y un aliciente para la grada, que corea con entusiasmo su nombre cada vez que trabaja su banda. Los muchos españoles que acompañaron a la Selección en el Parken de Copenhagen disfrutaron con todos, pero como casi siempre hicieron de ‘Cucu’ su bandera.

Zubimendi: falta Rodrigo, pero está Zubimendi. El realista tiene una disciplina táctica que aplica sin condiciones. Eso le hace tener claridad a la hora de mover al equipo, y cuenta con la ayuda inestimable de Merino, con el que ha formado pareja muchos años en la Real. Entre los dos le dan al equipo.

Merino: no es de los que se acerca a un toro por delante ni a un caballo por detrás, porque es el más listo. Robó un balón de gol que supuso el primer tanto de España, que marcó Oyarzabal a placer. Con Zubimendi en las tareas de contención, se sobró para poner ritmo al juego de la Selección. Entre Zubi y Merino consiguen hacer todo lo bueno que se ha perdido con la lesión de Rodrigo, el balón de oro.

Oyarzabal: marcó el primer gol de España tras una jugada trenzada, que culminó metiéndose con la misma tranquilidad con la que entra a su peluquería en Eibar. Marcó en la final de la Eurocopa el gol de la victoria ante Inglaterra y encaminó la Final Four de la Nations con su tanto en el Parken de Copenhague. Ya es el máximo goleador del año…

Baena: es un jugador con talento para hacer cosas distintas, que las hace, y a la vez es como un mosquito en la oreja a las tres de la madrugada. Juega y da la lata, a partes iguales, pero lo primero para los suyos y lo segundo para los de enfrente. Uno de esos que agradeces tener cerca y odias tener de rival.

Dani Olmo: ¡Vaya jugador que se ha perdido la Liga durante un montón de años! Tiene una facilidad asombrosa para elegir siempre la mejor opción, y lo ejecuta con la misma clase con la que actuó Audrey Hepburn en ‘Desayuno con diamantes’, pero en pantalón corto. El pase que le filtró a Ayoze en la jugada del segundo gol fue una delicia.

Ayoze: estrelló un remate en la misma cruceta tras un magnífico desmarque que leyó muy bien Porro, bien lúcido en la jugada. Se alternó con Dani Olmo en la posición de ariete y la fórmula funcionó como un buen motor de dos cilindros. Su lectura de la jugada del robo de balón de Mikel Merino en el primer gol de España puso el partido de cara. En la segunda parte metió su golito y demostró que ahí tiene peligro.

Sustituciones

Fabián: en su línea pese a la gastroenteritis que sufrió el jueves. Una pena el fallo que tuvo en la entrega a David Raya que provocó el gol de Dinamarca y que hizo sufrir a España los últimos diez minutos.

Morata: primer partido tras el golpe en la cabeza que recibió el pasado jueves. Lo remató todo con los pies.

Nico Williams: pegó dos carreras made in Nico de las que hacen temblar a los rivales.

Casadó: debutó con España y confirmó que esta Selección está teñida de azulgrana, por méritos propios.

Pedri: salió un ratito y dejó un par de detalles. Será titular el lunes en Tenerife.

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