Waldo Rubio, el único goleador del verano

Siguen pasando los amistosos -ya van cuatro-, y el gol de Waldo Rubio al Marino en el primero de ellos se mantiene como el único festejo blanquiazul en esta pretemporada. No es algo que preocupe en demasía al cuerpo técnico, pero sí a los aficionados, quienes además, han visto como Ángel tiene difícil llegar al debut por su lesión.

Hace unos días, el ex Valladolid había manifestado que vive un momento muy feliz en la Isla. “Me he adaptado muy bien a la isla y estoy en mi mejor momento físico después de la lesión que tuve hace año y medio. Estoy muy contento, estamos trabajando muy bien en la pretemporada, me estoy encontrando muy a gusto y deseando que empieza ya a rodar la bola”, expuso.

El de Badajoz, quien tuvo una jugosa oferta del fútbol mexicano, finalmente optó por renovar en el club hasta 2026. “Estoy muy contento. Sé el esfuerzo que ha hecho el club, y también tengo que dar las gracias a la afición, pues me he sentido muy apoyado por ellos en todo momento. Este es un proyecto bastante ilusionante y tenemos un buen equipo”, confió.

Además, Waldo enseñó su lado más exigente. “Puedo mejorar los números del año pasado, aunque tampoco me pongo ninguna meta ni estoy obsesionado con eso, sino que voy partido a partido. Soy un trabajador, lo doy todo y trato de ayudar tanto en defensa como en ataque a mis compañeros”.

Mucho tuvo que ver también, su gran relación con Toño Hernández, ‘Team Manager’ del equipo y quien se encuentra en Alicante. “Tengo una relación con él casi diría que familiar”, admitió, “porque es una persona que desde que llegué me ha ayudado en todo. Le tengo un cariño impresionante tanto a él como a su hijo y eso ha influido también”.