El Real Valladolid perderá a una de sus joyas

El Real Valladolid perderá, a partir del 30 de junio, a uno de los jugadores más brillantes de su cantera. Víctor Fernández, uno de los futbolistas más destacados de las categorías inferiores, integrante de la generación de 2007, que con tanta fuerza ha irrumpido en el escenario nacional e internacional, ha desestimado la última oferta de la entidad blanquivioleta y abandonará Los Anexos tras siete temporadas, como avanzó Cadena SER Valladolid y ha confirmado este periódico.

Con esta decisión se dará por cerrada una negociación casi elevada a una cuestión de Estado en Zorrilla, debido a la sensibilidad a la que obligaba la situación a todas las partes, tanto al club como a su entorno. No en vano, cabe recordar que el jugador es hijo de Víctor Fernández ‘sénior’, legendario dorsal ‘21′, uno de los mejores atacantes de la historia reciente del equipo y todavía empleado de la entidad.

Según ha podido saber Diario AS, después de varios meses de conversaciones, en los que se cursaron varios intercambios de propuestas y el diálogo siempre fue fluido, la última oferta del Real Valladolid era por cuatro años: uno primero con dinámica de primer equipo, aunque con la posibilidad de que participase con el filial, y tres en los que sería miembro del primer plantel a todos los efectos, incluido el contractual y el dorsal, a diferencia de lo sucedido con otros canteranos como Fresneda y Garri.

Esta propuesta cambiaba la sensación de que desde el club la apuesta por él no era firme; defienden en Zorrilla, provenía de una suma de esfuerzos que se pueden tildar prácticamente como históricos, dada la confianza que existe en su fútbol, que se manifestaba en los departamentos a los que involucraba. Sin embargo, y a pesar de poder ser considerado un blanquivioleta de cuna, por razones obvias, el mismo jugador ha optado por cambiar de aires y explorar nuevos horizontes.

Después de brillar con el Promesas en pretemporada y de comenzar el curso siendo internacional, con el paso de los meses, su rutilante irrupción no ha terminado de encontrar continuidad con más minutos en el filial, donde se ha visto tapado por otros futbolistas -algunos, aparentemente con poco recorrido a futuro-. Los ocho partidos que disputó se han traducido tan solo en 231 minutos y únicamente una titularidad, mientras que en el División de Honor suma más de 1.500 (y cinco goles).

Sin embargo, no hay que olvidar que se trata de un juvenil de primer año, de un adolescente que cumplió tan solo 16 años el pasado mes de noviembre, que ha notado el excesivo foco y el peso en la mochila de portar el legado del ‘21′, en su ciudad, pero también en la que idolatró a su padre, según confiesan desde su entorno, una circunstancia que, añadida al condicionante anterior, le ha llevado a tomar la decisión de dejar su casa, aunque con el mismo objetivo: forjarse un nombre en la élite como profesional, aunque sea con otros colores distintos a los suyos.

En el horizonte se le plantean unos cuantos equipos como posibles destinos, puesto que ha venido siendo observado por múltiples clubes del fútbol profesional; dos, de la zona del Levante, y otros dos, de otros puntos de la geografía española, si bien la decisión respecto a su destino, afirman varias fuentes a AS, aún no se ha traducido en la firma de un contrato con ninguna de esas entidades. La apuesta deportiva, no obstante, igualaría o mejoraría la propuesta del Real Valladolid.

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