Un paisano de visita
Enrique Clemente, zaragocista de formación, visitará La Romareda esta jornada. “Venganza ninguna, es un club al que le tengo mucho, mucho cariño”, afirmó esta mañana.
La frase dice que no hay mejor cuña que la de la propia madera y aunque no se trata de una verdad categórica es lógico que durante la semana previa al partido contra el Zaragoza, las miradas se giraran hacia Enrique Clemente, futbolista formado en la capital del Ebro. “Venganza ninguna, es un club al que le tengo mucho, mucho cariño. Tengo muchos amigos allí y siempre le guardaré mucho cariño”, se encargó de aclarar el defensa en cuanto pudo.
El central repasó el momento de su decisión de cambiar Aragón por Canarias. “A priori eran dos proyectos que luchaban por lo mismo, por estar arriba. Yo aposté por este club porque creía que tenía más herramientas para estar arriba. Tal vez sería muy ventajista decir que acerté porque creo que no sería justo para ninguno de los dos clubes”, rememoraba Clemente.
Su cariño al Zaragoza y el pasaporte tiran, y por eso afirmaba: “Con esa relación que se creó, he seguido este año un poco sus partidos, vienen de una de una racha buena”. Además analizó la parte de adelante, la que tendrá que neutralizar él en caso de saltar al césped. “Están jugando con un 4-4-2 muy claro con los dos delanteros que pelean mucho, sacan ocasiones de balones que parece que no llegan a ningún lado. Con balón intentan jugar pero sin complicarse mucho”.
Estima Enrique que hay una forma de contrarrestar el potencial zaragocista. “Creemos que a través del balón y estando muy atentos a esos dos delanteros que se quedan muy descolgados podemos superarles”, apuntaba.
Todos los ingredientes se alinean, por tanto, para que el central tenga una de sus citas más reseñadas. “Desde luego que será especial porque es la primera vez que voy a visitar La Romareda como visitante, la pisé muchas veces como local”, confesaba Clemente. “La verdad que con ganas de jugar otra vez en mi ciudad con mi familia, que seguramente estará en la grada y quiero disfrutar y ganar”.
Sin embargo, lo cortés no quita lo valiente y aunque tenga un significado especial personal, está mitad de algo más grande, la pelea por el ascenso directo. “Dentro del campo, como se dice no hay amigos, solamente veo compañeros y rivales, en ese caso”.