Un debut ‘Qasmi’ perfecto
El nuevo delantero del Eibar estuvo cerca de cerrar con gol un prometedor debut en los 9 minutos que disputó en Cartagena
Arrancar tu periplo como jugador en un nuevo equipo con el pie derecho no suele ser tarea sencilla. Rara vez un debutante firma una actuación de altura con la que impresionar a sus nuevos caseros. Y eso es lo que casi le ocurrió a Yacine Qasmi. Tras no disputar el duelo ante el Racing de Ferrol, uno de los dos últimos fichajes en llegar a Ipurua vistió la camiseta armera por primera vez, este pasado viernes, ante el Cartagena. Salió bien avanzada la segunda mitad, cerca de acabar el partido, y el debut fue casi perfecto. En apenas 9 minutos, luchó cada balón, ofreció entrega, generó ocasiones e, incluso, marcó un gol que fue anulado por fuera de juego milimétrico. El inicio soñado, la demostración de sacrificio, la suerte de empezar sumando o el infortunio de no coronar con un gol una primera actuación como aval del porvenir del jugador franco-marroquí. Ese gol, esa guinda del pastel, hubiese sido el elemento tangible al que aferrarse para que los armeros creyeran de forma fehaciente en el nuevo inquilino de la delantera eibarresa. Así, sin gol, es más complicado, aunque Qasmi ya ha dejado claras sus intenciones y su compromiso. Tiene hambre de jugar y en sus primeros minutos como armero, cuajó un debut casi perfecto.
El marcador de Cartagonova mostraba el minuto 85 de partido cuando el cuarto asistente daba paso, con su cartel luminoso, a la entrada de Yacine Qasmi para dar descanso a Stoichkov, uno de los goleadores de la noche. El partido estaba encaminado para la victoria. Pocos minutos para el final y uno arriba en el marcador. Un gol más supondría cerrar el partido. Y firmar un primera actuación de 10 para el nuevo ‘9′ del cuadro azulgrana. Desde el primer minuto de su debut peleó el balón. Falló una primera ocasión nada más entrar y mandó lejos la pelota en otra. En un instante, Tejero mandó al centro del área desde la banda derecha un largo balón raso, al que Qasmi llegó y metió el pie lo suficiente para colar el balón en el fondo de la red. Llegar y besar al santo. Eso, si el árbitro no lo hubiese anulado por un fuera de juego tan milimétrico como suficiente para dejar el debut perfecto en casi perfecto. Aún así, la actuación de Qasmi estuvo a la altura de lo que predicó en su presentación como jugador del Eibar. “Soy un delantero centro de área. Cuando te quedas dos meses sin equipo, esperando una oportunidad, llegas aún con más hambre para jugar”, advirtió el nuevo delantero armero. Su bagaje la última campaña en el Leganés no es prometedor. No es un gran goleador per sé. Prometer convertirse en el nuevo pichichi azulgrana sería ilógico y torpe. No es lo que viene buscando Qasmi, no se sabe si es eso lo que el Eibar busca en él. Lo que sí promete el jugador es trabajo y sacrificio. Su dilatada experiencia lo avala, al menos, de momento.
Habrá que ver si el paso de Yacine Qasmi por Ipurua es efímero o si, por el contrario, cumple con lo estipulado. Llego como refuerzo extraordinario por la falta de gol del cuadro azulgrana. El camino es largo y que sea con final en la plaza del éxito, complicado. Por pequeño que fuese, el primer paso para ello lo dio en Cartagonova. Habrá que ver si llega, de buena manera, a un destino por el bien común de todos los armeros.