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EL PROTAGONISTA DE LA JORNADA

Sergi Enrich, el delantero de Bolo que sonríe con Cervera

Enrich, con contrato hasta el 30 de junio, tiene delante la oportunidad de remendar una temporada que se inició torcida y en la que ya ha perdido a su gran valedor

Sergi Enrich, el delantero de Bolo que sonríe con Cervera
Eloy AlonsoDIARIO AS

Tras erigirse en el protagonista ante el Granada, en la victoria más especial del Oviedo este año, Sergi Enrich hizo una curiosa reflexión sobre su gremio. “A veces viene un nuevo entrenador te tocan una tecla y cambias. Los futbolistas somos un poco raros”, expuso ante los medios.

Nadie más adecuado que él para lanzar esa lectura. Porque Enrich está en el Oviedo por obra y gracia de Jon Pérez Bolo, el técnico que consumió su etapa en el club en un periquete de malos resultados y accidentes (plaga de lesiones por medio). Petición del entrenador vasco tras la fructífera relación de ambos en Ponferrada, Enrich nunca llegó a alcanzar su habitual frescura con su avalista. También parecía costarle con Cervera, pero su tanto ante el Granada cambia por completo el panorama. Ahora, vuelve a sonreír.

Por cómo definió, sutil taconazo tras centro de Lucas; por lo que significa el triunfo, el Oviedo sale de los puestos pantanosos; pero sobre todo por cómo se dio: ante uno de los más poderosos de Segunda y con un jugador menos desde el minuto 40.

Sergi Enrich encara a sus 32 años un desafío interesante a las órdenes de Cervera. Ha perdido parte de la chispa que le llevó a convertirse en un habitual del Eibar de Primera, el tiempo pesa, pero conserva su sentido del juego y esa sabiduría para encontrar los atajos al gol. Ha ganado, además, poso con la experiencia.

Atrás queda aquella condena por un delito de descubrimiento y revelación de secretos que le sitúo en la prensa rosa y le llegó a plantear, él mismo lo ha reconocido, dejar el fútbol. Ahora solo importa la pelota. Enrich, con contrato hasta el 30 de junio, tiene delante la oportunidad de remendar una temporada que se inició torcida y en la que ya ha perdido a su gran valedor en Oviedo. Con Cervera, el delantero quiere volver a brillar. El Granada puede dar fe de ello.