Secuelas disciplinarias de 2022
Las Palmas recibirá al Racing de Santander con la obligada ausencia de dos notables baluartes en su once, Curbelo y Mfulu.
A diferencia del común de los mortales con las dietas, aprender nuevas destrezas o dejar el tabaco, seguramente dentro de los buenos propósitos de García Pimienta para 2023 está bien alto en su listado el poder contar con la mayor parte de su plantilla, aunque al contrario de las primeros propósitos más comunes, este último se encuentra fuera de su total control.
Y es que, a pesar de marchar líderes, ese es uno de los grandes dolores de muelas que ha sufrido el técnico amarillo durante esta primera vuelta. Algo que además ha acompañado a muchos equipos de la categoría. Si no que se lo pregunten al Málaga, canterano que sacaba Mel, canterano que acaba lesionado.
No obstante, para el entrenador catalán mal de mucho consuelo de tontos y es que, como es lógico, son varias las veces que ha comentado que ojalá estuvieran todos los jugadores cuando en un choque ha presentado con numerosas bajas, que ha sido prácticamente siempre. Más como lamento de coraje, en vez como excusa preventiva.
Ese deseo no se lo podrán traer los Reyes Magos, porque el primer partido del año no es borrón y cuenta nueva. Y es que a diferencia de Barrabás, Mfulu sigue sancionado por la tarjeta roja que le sacó el árbitro poco después del calentamiento frente al Villarreal B. Como también se perderá el primer encuentro de 2023 Eric Curbelo por motivos disciplinarios.
Arrastra pues Las Palmas la certeza de dos ausencias sonadas para el arranque de un año natural que se espera ilusionante, por lo que los ojos se centran en Sidnei y Fabio como los primeros en la línea de sucesión porque así lo dicen los números. En las tres ausencias del mediocentro francés le suplió el cochinero. Al igual que el brasileño las veces el que faltó fue el satauteño, otras tres.