Remontada en casa, más de tres años después

Más allá de la fiesta por la victoria, las despedidas de muchos futbolistas que ya no jugarán más en el Heliodoro como blanquiazules y del adiós de Ramis, el Tenerife logró ante el Burgos un hecho que hace tres años, tres meses y 27 días que no conseguía: remontar un resultado adverso en el Rodríguez López.

La última vez que lo había conseguido fue en Copa del Rey ante el Real Valladolid, el 22 de enero de 2020 cuando Joselu y Dani Gómez acertaron para dar vuelta el marcador y eliminar a los pucelanos que se habían adelantado con gol del grancanario Sandro. La curiosidad es que el portero rival aquella noche fue el mismo que el del sábado: José Antonio Caro.

Desde entonces, el Tenerife no supo sumar los tres puntos en los 25 partidos que empezó perdiendo -entre ellos, por ejemplo, frente al Girona en la final por el último ascenso a Primera-. Lo máximo que logró fueron siete empates. Esta campaña, sin ir más lejos, cayó ante Zaragoza (0-2), Oviedo (0-1) y Èibar (0-1). Parecía que contra los burgaleses se repetía la historia, pero apareció Waldo para anotar el 2-1.

“Levantamos un partido en el descuento que lo hemos hecho pocas veces. Ha sido merecido por el trabajo del partido, pero en fútbol el acierto es importante”, opinó Luis Miguel Ramis quien en su último partido en casa, revirtió un partido por primera vez.

Eso sí, para encontrar la última remontada en Liga hay que irse hasta el 5 de mayo del 2019 con Carlos Ruiz como protagonista. Fue en un derbi canario con José Luis Oltra en el banquillo y el central, suplente aquel día, entró para revolucionar el partido ya que anotó el empate y gestó el tanto de Naranjo para el 2-1 final.