Portillo ya es uno más con el grupo para Calleja

Javi Calleja dirigió la sesión de esta mañana en un escenario diferente al habitual. Porque el entrenamiento se celebró en el Carlos Tartiere, como viene siendo habitual un día a la semana esta temporada. Pero el cambio de campo no fue la novedad más destacada de la mañana, sino la presencia de Francisco Portillo, el último en llegar, a las órdenes del entrenador.

Portillo es el protagonista de la operación más llamativa del Real Oviedo en mucho tiempo, sobre todo por lo inesperado de la misma. Pero el talentoso centrocampista se puso a tiro en unas condiciones que encajaban para el club carbayón y la dirección deportiva decidió dar el visto bueno a la operación. Portillo, sin equipo desde el pasado mes de junio, cuando ascendió con el Lega a Primera División, se comprometió con el Oviedo por lo que resta de temporada. Y lo hace con la idea de que siga su buena racha en Segunda: siempre que jugó en la categoría de plata acabó ascendiendo. Así sucedió con el Betis, el Getafe, el Almería y, más recientemente, con el Leganés.

Ahora está en su primera fase en Oviedo, la de encontrar el ritmo de entrenamientos adecuado con el grupo antes de que pueda empezar a contar para Calleja. El medio ha estado entrenándose por su cuenta todo este tiempo, a la espera de que cristalizara alguna propuesta interesante, como ha sucedido con la propuesta del conjunto azul. Su profesionalidad es alabada por todos los compañeros que ha tenido, así que parece que la integración de Portillo a la rutina será sencilla.

Problemas atrás

Además de comprobar cómo va la integración del último fichaje, la semana centra el interés en ver en qué piensa Calleja para recomponer su defensa. Tiene varias bajas el entrenador, que deberá encontrar la fórmula para que el equipo no se resienta. Esta vez, la mayor incertidumbre está en la izquierda, donde no hay lateral natural en la primera plantilla.

Con Luengo parece que recuperado, el carril diestro parece a buen recaudo a pesar de la lesión de Álvaro Lemos. En el centro, David Costas sigue recuperándose de su última dolencia, pero el juvenil Jaime Vázquez se ha asentado junto a Dani Calvo como pareja de centrales. Y para la izquierda hay un par de opciones sobre la mesa.

Si el entrenador quiere tirar de las soluciones que le da la plantilla, la más directa, aunque con un cambio de flanco, es la de situar a Lucas Ahijado en la izquierda. El ovetense es diestro pero sabe lo que es desenvolverse en carril zurdo, como demostró durante la etapa del Cuco Ziganda en el banquillo azul.

Alargar la racha

Calleja quiere el equipo más competitivo que empuje al Oviedo a estirar una semana más su magnífica dinámica en el Carlos Tartiere, donde el equipo acumula cinco victorias consecutivas. Es el mejor local de Segunda División en puntos por encuentro disputado. Ante un Tenerife en problemas buscarán el sexto triunfo seguido para seguir enganchado a los puestos de honor de la tabla de Segunda.