Paco López: “No quiero a ningún pesimista dentro del vestuario”
El entrenador del Leganés avisa que su equipo está “muy vivo” y prefiere no pronunciarse sobre si la solución está en el mercado invernal. “No he visto lo que dijo el presidente. Trato de aislarme”
¿Cómo mejorar en ataque? Es uno de los problemas que tiene el equipo…
Sí, es algo que ya llevamos bastantes jornadas teniendo como aspecto de mejora: la finalización de la jugada. Por todo lo que se genera y por todo lo que generamos, nos falta un poquito más de convicción y un poquito más de acierto.
El acierto y la fortuna van unidos. Hay que seguir insistiendo y persistiendo. Esa es la solución. No veo otra: entrenar, seguir entrenando e ir mucho más convencidos y creyendo mucho más en esos últimos metros.
¿Qué bajas hay para jugar ante el Zaragoza el domingo a las 14:00? ¿Cómo está Rubén Peña
Rubén Peña no llegará. Y te anticipo que vamos a tener alguna baja más, pero me gustaría que de momento mantuviéramos entre comillas ese pequeño secreto hasta mañana. No hace falta darles tantas pistas al rival. Mañana lo sabréis, pero sí es verdad que hay alguna baja más aparte de la de Rubén.
El presidente le ha mostrado su apoyo en público.
Siempre es de agradecer. Sabemos que el eslabón más débil cuando los resultados no funcionan es el entrenador, y que haya palabras del presidente que respalden el trabajo que se está haciendo es de agradecer.
De todas formas, siempre lo he sentido así, independientemente de lo que en un futuro pueda pasar. Siento que vamos de la mano todos los que estamos aquí: los que trabajamos en el club, fisios, médicos, utilleros, cuerpo técnico, todos. Así lo siento.
Es un reflejo más de lo que es este club, de la unión que hay. Y lo que más nos duele a todos, tanto al club como a nosotros, es que no estemos dando las alegrías que merece nuestra afición. Pero insisto en que ahora mismo en el vestuario tenemos una máxima: la negatividad y el pesimismo, si hay gente así, la queremos fuera del vestuario. De momento no la hay. Esa es nuestra máxima y vamos a seguir adelante en nuestras convicciones.
¿Hay más presión por no dejarse ganar por el colista?
En esta categoría, valorar a los equipos por la clasificación actual es lo peor que nos puede pasar. Hay una gran igualdad desde el primero hasta el último. Jugar contra el Zaragoza es jugar contra un gran equipo.
Puede parecer un tópico, pero es la realidad. A mí ya me extrañó muchísimo desde el inicio que no empezaran bien, porque tienen muy buenos jugadores: jugadores con experiencia, con calidad, rápidos. Y encima vienen de ganar estos dos partidos, y lo que supone a nivel psicológico para un equipo los hace todavía más peligrosos.
La clasificación no me dice nada. Vamos a tener enfrente un buen equipo que en su casa, con su afición, que ahora viene de ganar, lo va a tener a favor. Es un condicionante más, pero ya sabemos que esto es lo que nos encontramos cada semana. La dificultad es máxima en cada partido y no nos va a sorprender.
¿Cómo ha afectado el cambio de entrenador al Zaragoza?
Para hablar de eso tendría que hacer un análisis más profundo, y siempre hablo desde fuera. Desde fuera uno ve que tienen buenos jugadores y buen equipo, y lógicamente hay una parte que sorprende. Pero también es verdad que alguien tiene que empezar abajo y alguien terminar abajo. Es una carrera de fondo.
Sobre el cambio de entrenador no tengo ni idea. Eso lo tendrán que decir los que están allí. Lo que sí es una evidencia es que es un equipo con buenos futbolistas.
¿Cree que la falta de gol está siendo el principal problema?
Sí, uno de los principales problemas. Es una evidencia: nos está faltando acierto en esos últimos metros. Y el ejemplo, una vez más, fue el partido pasado. Las estadísticas hay que contextualizarlas, pero junto con el contexto, si te vas a los datos, hicimos 22 tiros, 10 entre los tres palos. Dime en esta categoría, y contra el rival que lo hicimos, si eso no es para tenerlo en cuenta.
Hay que seguir insistiendo. No hay otra solución. La preocupación para mí estaría si este equipo no generara. Eso sería mucho más preocupante. Pero es un equipo que genera mucho. Hay que seguir insistiendo y reforzando las cosas que el equipo hace bien. Pero cuando los resultados no son buenos, hay que insistir mucho más.
Luhnow dijo que hay jugadores que han superado expectativas y otros que han estado por debajo… ¿Está de acuerdo?
No sé en qué contexto lo dijo. Habría que preguntarle a él. Pero sí es una evidencia, y lo hablamos cada día en el vestuario, que siempre se puede dar más, que siempre podemos estar mejor, que siempre podemos mejorar. Por ahí no hay ninguna duda.
Conociendo al presidente, creo que más bien se refiere a jugadores que han sufrido lesiones o de los que esperábamos que se recuperaran antes. Seguramente vaya por ahí, pero habría que preguntarle a él. No creo que sea nada negativo. Insisto en que lo mejor que tiene este club es que vamos de la mano y que el rendimiento de los futbolistas debe seguir subiendo.
Habló con aficionados después de caer ante el Almería. ¿Ayuda eso a calmar la tensión?
No lo sé, me sale de manera natural. Entiendo a todo el mundo y me paré uno por uno con todos los que estaban allí. Hubo alguno cuya forma no me gustó, y simplemente les dije que si había respeto yo me paraba con todo el mundo. Lo que no tolero son los insultos.
Pero que me digan que están dolidos, que están decepcionados, que escuchan lo que escuchan… claro, tengo que escucharles. Si me tengo que parar con 60, me paro con 60. Iba con mi mujer y con las ventanillas abiertas para escuchar a todo el mundo. Son los que sustentan este mundo, ¿cómo no los vas a escuchar? Pero siempre con respeto.
Duk jugó de ‘9’ ante el Almería. ¿Puede ayudar ante la falta de gol?
Duk ya la semana anterior en Ceuta lo hizo. Tenemos una variante más. Dependiendo del partido y sus características, con balón hacemos una cosa y sin balón hacemos otra. Depende del rival, del momento y de lo que entendamos que es mejor. Lo importante es que cada jugador sabe cuál es su trabajo en cada momento. Y esa polivalencia siempre viene bien al equipo.
¿Figueredo será la alternativa a Rubén? ¿Maneja otras?
Sí, tenemos dos o tres alternativas. Vamos a valorarlo bien. Durante la semana tenemos que darle una vuelta a esa posición. Cambiar la estructura también es otra posibilidad. Pero sí, tenemos varias alternativas.
Luhnow centró su mirada en el mercado invernal. ¿Es la solución?
Yo no me paro a pensar en el futuro. Para mí eso es futuro. Me paro a pensar en el día a día, en el hoy y en el próximo partido, que es el Zaragoza. No le doy más vueltas.
Además, creo mucho en el presente, en el aquí y ahora. ¿Quién le dice que ahora salimos de la ciudad deportiva y me arrolla un camión? Ni hay fichaje, ni Zaragoza ni nada. Mi foco está puesto en el día a día. Lo digo por si esto viene por el posible cese o tal… Mi mente está puesta ahí. Mañana ya veremos. Ojalá no pase nada.
Cuando se anunció que el presidente hablaría, ¿creó expectativas? ¿Han visto esa entrevista?
Voy a ser sincero. Justo antes de entrar me han comentado que el presidente hizo una entrevista. Me acaba de llegar por WhatsApp, pero no he tenido tiempo de verla. Trato de aislarme de lo de fuera porque sé que me puede afectar. Mi foco está siempre en el trabajo, en que los jugadores mejoren, en que el equipo mejore, en ayudar al club a crecer, en darle alegrías a los aficionados, en cambiar los resultados. Ahí está mi foco y es donde disfruto. Lo demás… uno no es tonto y ya intuye lo que se dice y lo que se genera cuando los resultados no funcionan. Pero trato de aislarme.
¿Y cómo aislar a 20 y pico jugadores con sus entornos?
Esa también es mi responsabilidad. No solo lo que se ve en el campo a nivel táctico. También es responsabilidad del entrenador que a nivel mental y psicológico el grupo sea capaz de creer en el trabajo. Cada jugador es un mundo y tiene su entorno, pero tratamos de marcarnos un camino con unos mensajes muy claros desde el primer día y no salirnos de ahí. En lo que respecta a nuestra responsabilidad, tratamos de que sea así. Pero hay cosas inevitables que no se pueden controlar.
¿Existe la posibilidad de que el equipo juegue a otra cosa, ya que insistiendo no están llegando los resultados?
No sé a qué te refieres. ¿A cambios de estructura, de sistema, de jugadores? Hemos jugado con varias estructuras este año. Para mí lo principal es la identidad del equipo. Las señas de identidad están claras y el equipo cree en ellas. Por eso hablo de insistir. En nuestros análisis tratamos de ser lo más objetivos posibles.
Le aseguro que soy de los entrenadores que da voz al jugador. No es: esto está mal, esto está bien y se acabó. No. Escucho mucho a los futbolistas. Y todos coincidimos en que el camino es el correcto. Siempre hay detalles que cambiar, claro que sí, y tratamos de hacerlo.
Si los resultados anteriores en casa hubiesen sido otros, y el último partido hubiese acabado igual 0–3 con el mismo juego, estoy convencido de que la afición habría salido a aplaudir, porque el partido fue espectacular en todos los sentidos. Pero como venimos como venimos, es normal que se genere lo que se genera. La afición se duele y se decepciona con los resultados.
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La identidad del equipo está clarísima. Pero es fútbol y es complicado. Eso no significa que estemos contentos. Hay que seguir insistiendo en mejorar. El equipo está muy vivo y con todas las posibilidades para alcanzar los objetivos, independientemente de que ahora el principal objetivo sea la mejora, el día a día y el próximo partido.
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