Pablo Martínez regresa a su origen
Interior en la etapa de Calleja, Felipe Miñambres le ha devuelto a la posición de mediocentro, con Brugué y Rober Ibáñez recuperados para la causa en las bandas.
Pablo Martínez se destapó en su cesión al Mirandés como un futbolista total, capaz de jugar en casi cualquier posición sobre el terreno de juego. Para hacerse una idea de su polivalencia, llegó a jugar algún partido como central e incluso de delantero centro, pero en su etapa de formación siempre fue mediocentro. Con Calleja en el banquillo, el centrocampista madrileño se desenvolvía principalmente como interior, especialmente por la izquierda, pero con la llegada de Felipe Miñambres al banquillo granota ha regresado a su origen.
Con el astorgano tomando las riendas del equipo, Pablo Martínez ha abandonado la banda para establecerse en la medular, siendo titular en seis de las ocho jornadas de Felipe al frente y siempre en el eje del centro del campo, con Brugué y Rober Ibáñez recuperados para la causa en los costados, acumulando un gol y dos asistencias desde entonces.
De hecho, es el jugador que más produce en ataque del equipo (seis goles y cuatro pases de gol), por delante de Roger Brugué (5 goles y 3 asistencias), Sergio Lozano (un gol y siete asistencias) y Bouldini (siete goles). Por detrás de ellos se encuentra Dela (cuatro goles y dos asistencias) siendo el máximo goleador del equipo en 2024 pese a su condición de central.
Casi siempre con un guardaespaldas, ya sea Algobia, Oriol Rey o Giorgi Kochorashvili, pese a que en algún partido ha compartido el centro del campo con Lozano, Pablo Martínez se vio superado en la acción clave del partido frente al Amorebieta en el tanto de Unzueta, aguantando al equipo únicamente con la ayuda de Maras con un Levante volcado y sin sostén en franja ancha. Antes, iniciaba el camino hacia la victoria con un zurdazo desde la frontal para abrir el marcador ante un rival encerrado en campo propio y que sorprendió en los últimos compases del partido, sepultando gran parte de las esperanzas por asomar cabeza en los puestos de playoff.
El ‘10′ del Levante, que en los primeros partidos de la temporada se recuperaba de su lesión en el ligamento cruzado sufrida a mediados de marzo del pasado año, reapareciendo con el equipo a finales de septiembre, ya en la séptima jornada de campeonato, ha perdido el brío que le encumbró en el pasado tras su paso por el quirófano.
Pese a recuperar pronto su estatus de titular (ha disputado 28 partidos, 23 de ellos en el once), Pablo Martínez es un futbolista distinto al de antes de su lesión. Destacado por su capacidad física, Calleja llegó a afirmar que con él pletórico “parecía que jugaban con 12″. Si bien cabe recordar que hace poco más de un año la lesión en el cruzado le cortó las alas en su mejor momento.
Todavía por volver a volar como hacía antaño, Pablo Martínez está firmando los mejores números de su carrera, pero aún le faltan piernas para ser ese jugador diferencial en cualquier parte del campo. Como mediocentro, más resguardado, en la posición en la que inició sus pasos y le llevó a la élite, está volviendo a retomar el rumbo volviendo a sus raíces.
Pendientes de Algobia
El centrocampista, Ángel Algobia, se retiró con molestias en el muslo izquierdo en el tramo final del encuentro frente al Amorebieta y está pendiente de pruebas. “Espero que sea más que nada cansancio”, aseguró Felipe Miñambres en rueda de prensa. Sin embargo, Algobia, que ha presentado diversos problemas musculares a lo largo de la temporada y que ya lució un vendaje durante el partido en la misma pierna de la que resintió tiempo después, espera al OK de los médicos en la vuelta al trabajo de este martes.
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