Omar El Hilali, contra la maldición del lateral derecho
El joven futbolista, que aspira a afianzarse en una posición complicada en el club perico, recibió oficialmente el dorsal del primer equipo
No fue una rueda de prensa, tampoco una presentación al uso, sino que el club organizó por segunda vez un acto titulado ‘De la 21 al primer equipo’. Jofre Carreras inauguró el formato, pero esta vez el turno era de Omar El Hilali. Renovó con el Espanyol hasta 2027 hace un mes, pero hoy se formalizó su ascenso al fútbol profesional: “Es un jugador con hambre, con unas características importantes para el Espanyol. Pese a su edad teníamos claro que iba a dar rendimiento como así está siendo. Se lo ha ganado”, comentó un Fran Garagarza que abrió el acto. A partir de aquí, las risas, el buen ambiente y la felicidad inundaron la sala.
El acto lo condujo Ramón Guerrero, director de la residencia, que no paró de explicar anécdotas sobre Omar. De cuando se escondió en un armario para no ir al colegio o de todas las mañanas que llegó tarde a clase. De hecho, explicó que él nunca apostó por El Hilali que ahora ya sí es jugador de pleno derecho del primer equipo: “Quiero felicitarte porque te lo has currado. Yo no aposté por ti, me equivoqué, te pido disculpas y me alegro mucho”. Omar, que llegó al club en 2016, pasó cuatro años en la residencia del club.
Tras esta introducción le tocó el turno al protagonista, un Omar El HIlial que reconoció que “desde que llegué al Espanyol no ha sido fácil, pero con el esfuerzo que hemos hecho yo y mi familia ha sido posible cumplir el sueño”. Un sueño que arrancó en los campos de tierra de Santa Euàlia, su barrio de L’Hospitalet, rodeado de sus hermanos: “Siempre me han ayudado mucho. Poco a poco fui subiendo. Siempre jugué con gente de mayor edad que yo hasta que llegó un día que el Espanyol se fijó en mí y aquí estoy”, dijo. De hecho explicó que cuando recibió la llamada de su coordinador explicando que el Espanyol quería ficharlo se esperaba una bronca en vez de una buena noticia. Alguna trastada que otra había hecho.
Omar estuvo en todo momento arropado por su familia, de la que se deshizo en elogios: “Me intento preocupar por la gente de mi barrio. Tengo que ser agradecido, eso me ha inculcado mi familia. Me siento muy orgulloso de mis padres por todo lo que han hecho por nosotros. Somos seis hermanos. Han dado todo lo que tienen y más por nosotros. Es una felicidad inmensa tenerlos aquí. Todo lo que tenga y tendré será para ellos. Creo que la familia es lo más importante en esta vida”, zanjó. Su primer gol, que aún no ha llegado, irá para ellos.
En el plano deportivo Omar tiene como objetivos personales “seguir aprendiendo y trabajando día a día” y como colectivos, evidentemente, el ascenso. Y por trabajo no será: “Soy el mismo niño que era. Solo tengo 20 años. Cuando la gente cumple un sueño se relaja pero yo no, al contrario. Ahora que estoy en el primer equipo tengo que trabajar el doble. Por mí, por mi familia y por el club. Lo daré todo por el club”.
Su reto a medio plazo, también a largo, es asentarse en el lateral derecho del Espanyol, una posición ‘maldita’ en los últimos años. Varios son los jugadores que han pasado por ahí pero, desde Javi López, ninguno se ha hecho con la titularidad de forma clara en los últimos tiempos. De hecho tampoco el propio Javi en sus últimas temporadas, en las que fue criticado. Unas críticas que ha tenido que oír Óscar Gil, su compañero y rival por la posición, que pese a haber jugado 106 partidos con la camiseta del Espanyol nunca se ha consolidado de forma incondicional en el once. Ese es el reto mayúsculo que tiene Omar El Hilali por delante.
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