Ni “efecto Justo”, ni refuerzos ni resultados en el CD Lugo

Fran Justo llegó al CD Lugo trayendo un soplo de aire fresco a un equipo en caída libre. En su primer partido dirigiendo a los albivermellos sumó un valioso punto como local arrancándole un empate a un candidato a todo como es el Levante, que además se haría bueno en la siguiente jornada venciendo a domicilio a un rival directo como es el Racing de Santander, que ahora mismo marca la salvación en Segunda. Pero a partir de ahí el rendimiento del Lugo ha vuelto a decaer hasta el punto de sumar cinco derrotas en los últimos seis partidos, con la victoria como local ante otro poderoso como el Granada como único oasis. Tres puntos de 18 posibles que han sepultado al Lugo en el penúltimo puesto de la clasificación y al que solo los resultados ajenos han mantenido a cuatro puntos de la salvación. Además, se han perdido duelos clave ante rivales directos como la Ponferradina, el Mirandés o el mismo filial del Villarreal, que llegaba al Anxo Carro con tres derrotas consecutivas y a tres puntos del descenso y cuya victoria le dio aire.

Y es que la realidad del Lugo es tan clara como descorazonadora. La clasificación, esa que el jugador Marc Carbó afirmó que “no miro habitualmente, ni ahora ni en los buenos momentos” muestra un equipo en barrena. No solo no es capaz de imponerse a rivales directos, sino que a la habitual fragilidad como visitante suma además la impotencia como local, donde solo ha logrado retener doce puntos de 36 posibles y ganar tres partidos de 13 disputados, lo que le convierte en el tercer peor local de la categoría, solo por detrás de Racing de Santander e Ibiza. Si en las ruedas de prensa los protagonistas albivermellos insisten en que hay que convertir el Anxo Carro en un fortín, la realidad muestra que es más bien lo contrario, un estadio al que es fácil de sobrevivir llevándose puntos en el zurrón.

Ni siquiera la esperanza de una mejora en el mercado invernal parece algo a lo que los aficionados lucenses puedan agarrarse. A la mala planificación de la plantilla en pretemporada la dirección deportiva parece querer añadirle un mercado invernal igual de deficiente. Las dos incorporaciones que se han producido son baja sine die por problemas físicos, las salidas para hacer hueco se atascan y las llegadas no acaban de producirse. Además, el lateral zurdo se ha quedado cojo tras la salida de Orest Lebedenko dirección Coruña y aún sin sustituto, y la inhabilitación de Xavi Torres planea debilitando aún más el mediocampo del Lugo, ya casi en cuadro con la lesión de Juanpe. Un panorama global que llena de pesimismo el futuro de un Lugo que necesita urgentemente mejorar para salvar la categoría.