Naim por fin cumple su sueño
Cuatro años después de su eclosión en el primer equipo, y de encadenar tres cesiones distintas, el canterano del Leganés se ha consolidado como un imprescindible para Paco López.
Naim García tenía un sueño. No era diferente de los que atesoraban otros canteranos del Leganés. Jugar en el primer equipo. Vivir del fútbol profesional. Un anhelo que lo convirtió en gasolina para la esperanza y hambre con la que comerse el mundo. Ambas virtudes lo hicieron brillar cuando, en 2021, debutó con el primer equipo. Sueño cumplido. Asier Garitano le dio alas y aquel esmirriado chaval de piernas alambradas se ganó un puesto entre los mayores. No le duró mucho. El sueño parecía que se esfumaba. Hasta ahora.
Porque aquel debut intenso derivó luego en una trayectoria errática que, en las últimas temporadas, apuntaba más a la despedida que a la continuidad. A la salida por la puerta de atrás que a una posible consolidación en la plantilla blanquiazul. Un planteamiento nada descabellado si se tiene en cuenta que, hasta su vuelta el pasado verano a Butarque, había encadenado tres cesiones consecutivas: Ponferradina, Barcelona B y Racing de Ferrol fueron sus destinos con apenas dos periodos intermedios al sur de la capital: el inicio de la temporada 2022-2023 y el comienzo de la pasada temporada en Primera.
Del lamento a la consolidación
Quiso el destino que cuando Naim negociaba opciones para marcharse en el verano del retorno a la élite una lesión al final del mercado lo dejase KO y sin opciones de encontrar un nuevo equipo. Naim se recuperó a comienzo de temporada y, aunque contaba con ficha, Borja Jiménez no le dio oportunidades de jugar. Incluso situó por delante de algunas convocatorias de Liga y Copa a Iker Bachiller, ex canterano. El técnico dejaba así claro que no contaba con él.
Esas decisiones fueron duras para Naim (y mal vistas por un vestuario que tiene especial cariño al chaval) y le abrieron la puerta a una marcha en el Racing de Ferrrol donde, pese al descenso a Primera RFEF (el segundo en su carrera tras el de la Ponferradina), tuvo un buen rendimiento que, con la vuelta al sur de la capital, transformó en una notable mejoría.
Inicialmente Naim partía con pocas opciones sobre el papel para ser titular en el equipo de Paco López. Sucede que la pretemporada cambió los planes del técnico. Lo colocó por delante de Roberto López y de Pauwels hasta transfórmalo en un intocable. Con 932 minutos es el cuarto jugador de campo de los pepineros con más minutos disputados. De los doce partidos que ha disputado, once han sido de titular.
Un surtidor de balones
En registros atacantes es uno de los pepineros más eficaces, con dos goles y, además, un arsenal de centros desde la banda izquierda que ya han servido para anotar un gol: el que recortó distancias ante la Real B, obra de Diawara, salió de sus botas. Un medio centro desde la banda izquierda. Algo habitual en este futbolista que ya es el que más centra de la plantilla, con 86 centros en lo que llevamos de curso. De ellos 24 han sido acertados.
Buenos números que maridan con su versatilidad. Naim es, originariamente, extremo (derecho o izquierdo, da igual, pese a ser zurdo), pero en su evolución ha aprendido a ejercer de carrilero o lateral en una bendición para Paco López que, ante los problemas de estructuración de la plantilla (un único lateral nato, Franquesa, y un único recambio, el central Marvel) ha tenido que tirar de Naim con excelentes resultados en casi todos sus partidos.
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Normal que ahora sea un intocable con opciones de poder continuar en Butarque más allá de lo que dice su contrato. Firmado en 2021, amplió su relación hasta 2027 con una cláusula de rescisión de 25 millones de euros. Ahora el club medita atarlo más en corto con una nueva renovación.
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