Mollejo y un extremo, próximos objetivos de Cordero
El delantero tiene vinculación con el Atlético de Madrid hasta 2026 y todo pasa por acordar una nueva cesión, mientras el abanico de extremos (Mboula, Andrés Martín o Thomas) también tiene contrato en vigor y hay que negociar a tres bandas.
Un extremo y el delantero Víctor Mollejo son los dos próximos objetivos de Juan Carlos Cordero, tras los fichajes en cadena de Maikel Mesa, Lecoeuche, Bakis y Toni Moya, además de la repesca de Marc Aguado. El director deportivo del Real Zaragoza lleva madurando un abanico de gestiones con extremos como Mbolua (Mallorca), Andrés Martín (Rayo Vallecano) o Thomas (Paços de Ferreira portugués), aunque sus objetivos tienen contrato en vigor y hay que negociar a tres bandas, lo que dificulta el acuerdo mucho más que en las cuatro primeras incorporaciones.
Por ejemplo, a Mboula (Granollers, Barcelona, 1999) le queda un año de contrato con el Mallorca y no entra en los planes de Javier Aguirre, pero tiene un salario de 800.000 euros brutos que el Zaragoza no puede afrontar ni en una cesión, y lo primero es que se desligue del club balear mediante una rescisión pactada, lo que está negociando en estos momentos con el clásico tira y afloja.
Cordero también ha preguntado por Andrés Martín (Rayo Vallecano), al que llevó cedido al Tenerife hace un año y medio, pero al futbolista, de 24 años, le queda un año de contrato en Vallecas y hay que lograr un acuerdo con las dos partes.
El interés por volver a contar con Víctor Mollejo es admitido sin problemas por el propio Cordero: “A las dos partes nos gustaría seguir y estamos negociando un acuerdo con el Atlético de Madrid que a día de hoy no lo hay”. Mollejo completaría la delantera del Zaragoza, salvo que surgiera una gran oportunidad de mercado durante el mes de agosto. “Me gustaría tener un delantero más. Quizá alguno más rápido y distinto a Azón o Bakis. Quizás Mollejo nos daría ese perfil que nos falta. No estamos cerrados a nada”, señaló el jueves el director deportivo.
El fichaje en propiedad de Mollejo parece inasumible, porque le quedan tres años de contrato con el Atlético y su salario está ligeramente por encima del millón de euros brutos, así que todo pasa porque el club rojiblanco asuma otra vez la mayor parte de sus emolumentos.
Finalmente, Cordero tiene en su mejor diseño de plantilla la incorporación de otro extremo, un central, un portero y un lateral derecho, aunque esa expectativa hay que compaginarla con las salidas de los transferibles Sabin Merino, James Igbekeme, Manu Molina, Eugeni, Carbonell, Baselga e, incluso, Fran Gámez.