Miguel: “Da igual ser plan A, B o C, quiero estar donde me quieren”
El nuevo delantero del Leganés admite que no le importa ser plan B a Karrikaburu. Afirma que sólo cinco minutos de charla con Txema Indias lo convencieron para atar su retorno.
Miguel de la Fuente es caso peculiar de fichaje fugaz. También fulgurante. El nuevo delantero del Leganés cerró su incorporación por los pepineros el último día del cierre de mercado. En solo cinco minutos de charla en la que Txema Indias, director deportivo blanquiazul, le convenció para retornar a Butarque dos años después de su salida. “Confíe en Txema y mis agentes y ya no quise saber nada más”, ha confirmado durante una presentación en la que (y ahí la paradoja de su fichaje) no le ha importado reconocer que era plan B del culebrón del verano por Butarque.
Porque el Leganés quería a Jon Karrikaburu como primera opción, escenario que Miguel de la Fuente ha admitido con deportividad. “Cuando el Alavés quiere a Karrikaburu yo quiero estar donde me quieren. Fue aquí. Cada entrenador o director deportivo puede tener un fichaje A, un B o un C. Mientras me propongan una idea que me guste me da igual que hayan sonado otros nombres. En cuanto me enteré, tenía claro que quería venir aquí”, ha insistido un Miguel que, minutos después, ha visto como el propio Txema Indias le echaba un capote.
“Si Miguel hubiera estado en el mercado os puedo asegurar que hubiera sido la primera opción desde el primer momento”, ha confesado Indias, quien días antes ya había empezado los contactos con el Alavés y los representantes del jugador para allanar el camino cuando fuera necesario pisar el acelerador.
“Siempre supe que quería volver”
El director deportivo ya intentó repescarlo después de que acabara su primer curso en Butarque. Entonces no fue posible. Pero ahora sí en un movimiento que Miguel de la Fuente confiesa que siempre tuvo en la cabeza. “Siempre he tenido claro que en algún momento me gustaría volver. Pero posibilidad real no había durante estos años que he estado en el Alavés (…) Quería estar aquí, es un club al que cogí mucho cariño y me dio la oportunidad cuando la necesitaba. Ahora quería devolverle esa confianza que me dio”, ha añadido en referencia a su fichaje en 2020.
Entonces Miguel de la Fuente se agarró a una anómala cláusula de su contrato en Valladolid por la que, si un club le igualaba el sueldo que cobraba en Pucela, podría irse cedido de forma unilateral, sin el permiso de los blanquivioletas. El único club que aceptó aquel movimiento fue el Lega. E incluso les llevó a los tribunales para acabar cerrando un acuerdo de partes por la que el club debió pagar una indemnización al Valladolid. Después, Miguel terminó contrato y, pese a estar libre, acabó en el Alavés. Ahora retorna con galones de jugador importante.
“Ahora tengo más experiencia”
“Tengo más experiencia. Estos años he jugado en momentos más y en otros menos he tenido experiencias positivas y negativas. Tengo que aprender de ello. He jugado un año en Primera, que la exigencia es mayor. Vengo con más experiencia”, ha dicho ya con dos partidos como pepinero de nuevo en sus piernas. Debutó sin un entrenamiento si quiera ante el Eibar y fue titular ya el pasado fin de semana contra el Huesca.
“Cuando me fui dije que me gustaría haber jugado más partidos con la afición en el campo porque solo jugué la vuelta del playoff”, ha añadido sobre aquel curso especial que, por la Pandemia, se jugó sin público en las gradas “Siempre me ha gustado volver y sentirlo como local, estoy muy contento. (…) En mi mano está el trabajar, el esforzarme. Creo que los goles son rachas que llegarán con el trabajo. El trabajo no lo puedo negociar. Tengo confianza en mí mismo y agradezco a la afición que tenga confianza en mí. Yo se la voy a devolver”, ha concluido su puesta de largo.